Nuevas tarifas para un mercado liberalizado
Renfe tiene los días contados. La compañía desaparecerá como tal el 1 de enero con la entrada en vigor de la Ley del Sector Ferroviario, que marcará el inicio de la liberalización ferroviaria. Tras 63 años de monopolio, Renfe se escindirá en dos entidades públicas: el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que gestionará las vías del tren y las estaciones, y la nueva Renfe Operadora, que se convertirá en un mero transportista de mercancías y viajeros que competirá con otras empresas.
El transporte de mercancías será el que comenzará a abrirse a la competencia este sábado. El de pasajeros tendrá que esperar hasta 2010, según el calendario marcado para toda la Unión Europea. En cualquier caso, el Gobierno ha garantizado que la liberalización no se traducirá en la privatización de ninguna de las nuevas dos empresas.
Los nuevos rivales de Renfe, que perderá un monopolio de 63 años, podrán pedir de inmediato al Gobierno una licencia para operar en el negocio de carga. Algunas compañías han mostrado su interés (Transfesa, Alsa, ACS, FCC, Acciona, Auto Res). En Suecia, donde las mercancías ya están plenamente liberalizadas, una de las empresas que compiten en carga con el antiguo monopolio es Ikea Rail, propiedad de la popular cadena de muebles.
El Adif también absorberá al Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF), que en la actualidad gestiona las líneas de alta velocidad. El Adif otorgará los permisos de ocupación de la vía a las diferentes empresas, incluida Renfe, que deberán pagar un canon anual por su uso. También controlará el tráfico en la vía, y la seguridad.
Los sindicatos mayoritarios en Renfe (CC OO y UGT) descartaron ayer que el proceso de escisión en dos empresas de Renfe genere problemas operativos en el transporte en tren, informa Europa Press. Además, estas dos centrales y el Sindicato Ferroviario tienen previsto firmar hoy con la dirección de Renfe un nuevo convenio colectivo para los 32.000 trabajadores de la empresa, que a partir de enero se repartirán entre la nueva Renfe y el Adif.
