La nueva Ley de Defensa prohíbe enviar tropas a guerras ilegales
El Gobierno estará obligado a consultar al Parlamento las misiones en el exterior
La futura Ley Orgánica de la Defensa Nacional, a cuyo borrador ha tenido acceso EL PAÍS, prohíbe el envío de tropas españolas a una guerra ilegal, calificativo que empleó el secretario general de Nacional Unidas, Kofi Annan, para definir la invasión de Irak. La reforma impone dos requisitos para la participación de las Fuerzas Armadas en una misión en el exterior que no esté relacionada con la defensa nacional: que haya sido autorizada por la ONU o por las organizaciones internacionales a las que España pertenece (Unión Europea, OTAN, OSCE) y que no vulnere el Derecho Internacional. Además, el Gobierno estará obligado a consultar al Congreso antes de ordenar la participación del Ejército en estas operaciones, salvo en caso de extrema urgencia.
La Ley Orgánica de la Defensa Nacional es la ley más importante en materia de defensa. Sustituye a la Ley de Criterios Básicos de la Defensa Nacional de 1980, que fue reformada en 1984. El ministro de Defensa, José Bono, expresó el pasado lunes en una comparecencia en el Senado su propósito de consensuar la ley con el Partido Popular.
El borrador del anteproyecto de ley introduce numerosas novedades. Entre otras, la creación del Consejo de Defensa, que "asistirá al presidente del Gobierno en la dirección de conflictos armados y la gestión de situaciones de crisis que afecten a la defensa". Será el equivalente español del Consejo de Seguridad Nacional de EE UU y sustituirá a la Junta de Defensa Nacional, que presidía el Rey.
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