12 inmigrantes huyen del centro de retención del puerto de Motril
Doce de los 49 inmigrantes que permanecían encerrados ayer en el centro de retención de inmigrantes del puerto de Motril (Granada) consiguieron burlar la vigilancia y escapar de los agentes. Los extranjeros rompieron la cerradura de la puerta que une ese edificio con el vecino de la Cruz Roja del que salieron huyendo hacia las 9.00 de la mañana. La policía cree que algunos ya conocían el centro al haber sido detenidos en otra ocasión. La puerta por la que se fugaron carecía de cámaras de seguridad. Los agentes encontraron a tres en las inmediaciones del puerto.
El centro de retención de inmigrantes del puerto de Motril es el lugar al que van a parar todos los inmigrantes detenidos en pateras que intentan alcanzar las costas de Granada. Se trata de un barracón de unos 100 metros cuadrados unido al edificio de comunicaciones que la Cruz Roja utiliza como almacén de mantas ropa, comida y material sanitario para los recién llegados, y sede para los voluntarios que los atienden. Los extranjeros suelen permanecer en él sólo unas horas antes de que la Policía Nacional los traslade a Granada para viajar en avión hasta Melilla, desde donde los agentes los dejan en la frontera con Marruecos.
A cinco millas
49 ciudadanos de ese país, todos hombres y mayores de edad, se encontraban en la madrugada de ayer en ese edificio. La Salvamar Mirfak, la lancha de Salvamento Marítimo con base en el puerto de Motril, los había encontrado a sólo cinco millas de la costa después de recibir un aviso de otra embarcación del Servicio de Vigilancia Aduanera que patrullaba la zona hacia las 22.00 del pasado martes.
Los detenidos llegaron a puerto pasadas las 24.00, donde los voluntarios atendieron a tres de ellos por presentar síntomas de hipotermia leve y a otros dos por quemaduras en los pies. Ninguno tuvo que ser trasladado al hospital.Todos fueron encerrados en el centro de reclusión de inmigrantes donde la policía comenzó los trámites para su repatriación, pero a las 9.00 doce escaparon abriendo una de sus puertas sin que los agentes lo advirtiesen.
