_
_
_
_
_
PANTALLA INTERNACIONAL

'Un día sin mexicanos' se estrena entre Tijuana y San Diego

Arau trata la desaparición de los 14 millones de hispanos en California

Juan Jesús Aznárez

Habitantes de las fronterizas Tijuana (México) y San Diego (Estados Unidos) se reunieron en la línea divisoria más cruzada del mundo para asistir a la proyección de Un día sin mexicanos, ópera prima del director Sergio Arau, que aborda el pasmo de los gringos de California cuando una mañana observan la misteriosa desaparición de toda su mano de obra: millones de inmigrantes latinos. Cunde el pánico. El visionado de la sátira se efectuó en el parque Playas de Tijuana, con tres pantallas gigantes visibles a ambos lados de la frontera, y fue organizado por el Foro Tijuana Tercera Nación, que promueve la desaparición de los muros y el renacimiento cultural de una localidad estigmatizada por la violencia.

"Unas rejas y unos muros intentan separar a dos comunidades que se necesitan"

La controvertida película, que llegará a España en noviembre, después de haber sido estrenada a mediados de año en Los Ángeles, aborda la angustia de los californianos al conocer que un tercio de su población, 14 millones de hispanos, desapareció sin dejar rastro. Alguien debe hacer lo que hacían ellos porque se han ido las empleadas domésticas, los camareros, los basureros, los conductores del transporte público, los jardineros, las niñeras, los braceros, los maleteros: los criados. California queda incomunicada y las consecuencias económicas, políticas y sociales la conducen al colapso. El regreso de los latinos se convierte en la prioridad número uno del Estado. "Regresen, amigos", se implora en cartelones.

Los principales personajes son Mary Jo Quintana (Maureen Flannigan), maestra y ama de casa; el senador Abercrombie (John Getz), ascendido apresuradamente a gobernador; Louis McClaire (Muse Watson), dueño de un rancho y representante de los empresarios agrícolas, y Lila Rodríguez (Yareli Arizmendi), periodista y aparentemente la única latina que no ha desaparecido del mapa. La obra ha pegado en México por razones obvias. Una frontera común de 3.200 kilómetros, 22 millones de inmigrantes de origen mexicano y múltiples intereses ligan el futuro de Estados Unidos y México.

"Y además estamos absolutamente convencidos de que el futuro de México pasa por aquí, por Tijuana", declaró el español Antonio Navalón, director del Proyecto Tijuana Tercera Nación. "Unas rejas y unos muros intentan inútilmente separar a dos comunidades que se necesitan y complementan". Políticos mexicanos y legisladores demócratas norteamericanos, entre ellos Adolfo Aguilar Zínser, ex embajador de México ante Naciones Unidas, y la diputada californiana Cindy Montanez y otras figuras públicas de Tijuana acudieron a la original proyección y al debate del foro la pasada semana. "Esperamos que esta película ayude a que reconozcan a nuestra raza, que es la raza humana", subrayó Arau.

Millones de inmigrantes de origen mexicano o latino trabajan en Estados Unidos con sus derechos laborales, civiles, legales y humanos menoscabados. "¡Viva México! y "¡Alabí, alabá... México, México, rarrarrá!", gritó la muchedumbre durante la presentación, desarrollada junto al muro levantado por Estados Unidos para impedir la inmigración ilegal. Las remesas de los mexicanos domiciliados en Estados Unidos se acercan a los 15.000 millones de dólares anuales y superan a los ingresos derivados de la inversión extranjera.

El filme, que sintoniza con la filosofía de Tijuana Tercera Nación, fue hecho por mexicanos que viven en California, entre ellos el propio Arau y su esposa, la guionista Yareli Arizmendi. El emigrante se gana la vida en Estados Unidos pero también echa una mano a su gente al ocupar puestos que los nacionales desprecian. Debe ser considerado ciudadano, no animal de carga. Ése es el mensaje. Un fenómeno presente en todo país receptor de peones. El gobernador del Estado norteamericano, Arnold Schwarzenegger, pidió una copia de Un día sin mexicanos, se la enviaron, pero no respondió a ninguna de las invitaciones a verla en público.

La temida Border Patrol, la patrulla fronteriza norteamericana, no se hizo presente durante la proyección de Tijuana. Navalón Sánchez pidió reflexionar sobre una película y un foro de intencionalidad integradora. "Esta noche quiero imaginarme una noche sin muros, una noche sin fronteras, y quiero imaginarme que nuestras ganas de vivir podrán superar el miedo", subrayó el director de Tijuana Tercera Nación, que desarrolla su primer año con vocación de permanencia. Los californianos perdieron las ganas de vivir y fueron ganados por el miedo al imaginarse abocados al duro tajo antes atendido por sus inmigrantes, esos seres a los que no prestaban importancia pero cuya evaporación trastoca sus vidas.

Más de 40 millones de hispanos, la mitad de origen mexicano, viven en Estados Unidos. Sergio Arau no descarta una franquicia de la película. Un día sin latinoamericanos y sin africanos podría ser el título en España.

Sergio Arau y su esposa, la actriz Yareli Arizmendi.
Sergio Arau y su esposa, la actriz Yareli Arizmendi.ASSOCIATED PRESS
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_