Blasco tiene pendiente de ejecutar la repoblación de más de 8.000 hectáreas

La Generalitat ha actuado en un año sobre una superficie de 3.500

Valencia - 22 ago 2004 - 00:00CEST

Rafael Blasco, consejero de Territorio y Vivienda, tiene pendiente de reforestar 8.059 hectáreas de suelo forestal, incluido el último compromiso de actuar sobre 120 hectáreas de las 716 afectadas por el reciente incendio en el Parque Natural de la sierra de Calderona. Cuando hace más de un años se hizo cargo de Territorio y Vivienda, se comprometió a repoblar 11.539. Hasta el momento ha actuado sobre 3.400.

Algo más del 29% de unas actuaciones que presupuestó la Generalitat en 12 millones de euros ya se han ejecutado. Hasta agosto de 2004, Blasco ha concluido 20 proyectos, de los que ha puesto en marcha, que afectan a 30 municipios sobre una superficie de 3.400 hectáreas. Los otros 20 proyectos pendientes, según Blasco, están en vías de ejecución. De ellos, 14 depende directamente de la Consejería de Territorio y Vivienda, tres se desarrollan en cooperación con la confederación Hidrográfica del Júcar,dos se derivan del Ministerio de Medio ambiente y uno está financiado por Caja Madrid.

Son al menos tres los proyectos pendientes para la provincia de Alicante: restauración ambiental de la Granadella; restauración ambiental en la cuenca del río Segura; y la que afecta a los montes y cuenca del Vinalopó.

La restauración ambiental del monte público de la Granadella, en término municipal de Xàbia, se extiende por algo más de 145 hectáreas y la reforestación consistirá en la plantación de 85.000 unidades de especies autóctonas.

La intervención de reforestación en la cuenca del Segura es fruto de un convenio suscrito con el Ministerio de Medio Ambiente, afectará a más de 530 hectáreas y supondrá la plantación de 390.000 unidades de especies autóctonas. Esta restauración medioambiental se sujeta en un presupuesto de 2.576.000 euros. "Con ello reduciremos los niveles de desertización y erosión de la zona y resolveremos problemas muy importantes de Alicante, además de mejorar el paisaje", explica Rafael Blasco.

Freno a la erosión

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Para la provincia de Valencia hay pendientes varias actuaciones de restauración de tipo hidrológico-forestal. Sobre el papel, 4.300 hectáreas de los términos de Ademuz y Castielfabib serán objeto de una reposición de marras, con una plantación de 145.000 ejemplares.

Otra de las actuaciones comprometidas se refiere a la cuenca del río Cànyoles en Vallada y Moixent sobre 130 hectáreas. Y el plan más ambicioso concentra sus esfuerzos sobre el embalse de Loriguilla, sobre todo en los términos de Calles y Domeño. Se destinarán, según lo previsto, tres millones de euros (lo mismo que para las intervenciones en la sierra Calderona tras el incendio). Blasco dice que "son actuaciones especialmente necesarias por su capacidad de defensa frente a la erosión y desertificación de la zona".

El Desert de les Palmes, Canet Lo Roig y Xert (en este último municipio se perdieron unas 2.000 hectáreas por un incendio en septiembre de 2002 y la reforestación aún está pendiente) son los tres proyectos de actuación en Castellón. En el primer espacio, paraje natural, se prevé una intervención sobre 72 hectáreas en las que se plantarán especies autóctonas como el lentisco, la encina, el aladierno, el alcornoque o el pino rodeno. En el terreno arrasado en 2002 en el Baix Maestrat, la intervención sobre 517 hectáreas está apoyada por la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Preparar el terreno

Territorio y Vivienda, junto con la Fundación Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), según explica el consejero Rafael Blasco, ha promovido un proyecto de I+D "para la puesta a punto de una metodología estandarizada de evaluación a corto plazo de las repoblaciones forestales, que ya ha quedado plenamente contrastada con el muestreo de más de 1.800 hectáreas". Según él, esos muestreos sobre las superficies en las que se tiene previsto actuar "permitirán mejorar el control de calidad, optimizar los criterios de actuación en relación a los resultados obtenidos y homologar los resultados en otras zonas de características similares".

Y una de las primeras conclusiones permite valorar que la técnica de preparación del terreno para la repoblación de forma mecánica registra en general mayores supervivencias que las manuales.

Blasco destaca que el llamado Plan 40.000 Comunidad Valenciana permitirá "lograr una serie de objetivos entre los que destaca la lucha contra la erosión y la desertificación, mejorando las condiciones de formación de los recursos hídricos a través de la recarga de acuíferos y la restauración hidrológico-forestal". Y puntualiza que del total de hectáreas a repoblar, el 90% son proyectos redactados y ejecutados por Territorio y Vivienda, el 6% por las Confederaciones Hidrográficas, el 3% por el Ministerio de Medio Ambiente y el 1% por empresas privadas.

La Comunidad Valenciana tiene una superficie forestal que supone el 52% del territorio. Esa cifra supera en cinco puntos a la media española y en más de 12 a la del resto de Europa. Según Blasco, el suelo predominante en las tres provincias es forestal.