_
_
_
_
Reportaje:CULTURA Y ESPECTÁCULOS

Forqué entra en la soledad lorquiana

La actriz prepara, junto a Miguel Narros y otras figuras como Julieta Serrano, 'Doña Rosita la soltera'.

El director escénico Miguel Narros, la actriz madrileña Verónica Forqué y el escenógrafo y productor Andrea D'Odorico vuelven a formar la misma tríada con la que la temporada pasada triunfaron al montar El sueño de una noche de verano, de Shakespeare. Ahora le toca el turno a García Lorca y una de sus obras más poéticas: Doña Rosita la soltera, que se estrenará en el teatro Español de Madrid el 8 de septiembre, donde permanecerá hasta el 10 de octubre, antes de hacer gira por España.

Hasta entonces, Doña Rosita la soltera sufre la canícula estival madrileña y el equipo que la prepara trabaja a destajo en el montaje. El grueso de la obra se asienta sobre los personajes que interpretan Verónica Forqué, Julieta Serrano, Alicia Hermida y Roberto Quintana. Pero el montaje cuenta con otros 13 intérpretes, entre los que destacan dos reconocidos actores como Ana María Ventura y Fernando Sansegundo. Además, forman parte de ese equipo la bailaora Manuela Vargas como coreógrafa, Juan Gómez-Cornejo como iluminador y Mariano Díaz como compositor.

Todos dicen sentirse atrapados por la poética lorquiana y la historia de Rosita. Narros encuentra aromas beckettianos (Rosita también espera a su Godot) y paralelismos con Goethe y Lope: "Pero, al contrario que Goethe, Federico era incapaz de encadenar sus instintos y pasiones bajo la fría serenidad de su rendimiento intelectual; en cambio me recuerda a Lope cuando observo entre su vida y su obra ese intercambio espiritual y físico constante, apasionado y fecundo", dice el director.

En un descanso de los ensayos, Narros, que ha puesto en pie muchos Lorcas, pero nunca éste, comenta: "Esta obra tendría que estar siempre en cartel, hoy conmueve porque aborda un tema como el de la soledad. La gran tragedia, de la que los jóvenes no son conscientes, es lo que el tiempo hace con las personas, ese tiempo que pasa tan rápido y que nos convierte a todos en juguetes suyos", apunta el director, quien ve en la obra una conjunción perfecta: "Es un poema de amor y de soledad, muy marcado, lleno de sorpresas, con ribetes surrealistas y una importante carga existencialista".

Todos los que saben de este proyecto coinciden en asegurar que el papel protagonista de Rosita le va que ni pintiparado a Verónica Forqué. El personaje lorquiano y la actriz madrileña están poseídos por un eterno aire inocente, juvenil e ingenuo, del que no se desprenden con los años. Es el primer Lorca para ella, quien alternará este trabajo con el rodaje de Reinas, de Manuel Gómez Pereira: "Ahora ya puedo hacer estas cosas sin sufrir y disfrutando de las giras", dice en referencia a que la crianza de su hija la ha apartado de los escenarios más de una década.

Verónica defiende la actualidad de la obra por la directa: "Hoy la soltería en las mujeres es un problema, tengo muchas amigas de mi edad que no han tenido la suerte de encontrar un compañero, sufren muchísimo y siguen haciendo lo posible para enamorarse; todo está mal repartido, porque para ellos, no sé por qué, la situación es distinta". Y explica su teoría: "Un hombre cincuentón, aunque sea feucho y un aburrido, encuentra un apaño, pero ellas, aunque sean estupendas, no; estoy segura que muchas mujeres se van a identificar, porque el hombre sigue engañando mucho a las mujeres, y ellas siguen creyéndose todo..., y eso es muy triste".

Julieta Serrano considera que esta obra es perfecta: "Ese juego de la realidad y del recuerdo, del tiempo que pesa, esa cosa inmaterial que tiene la obra está muy bien reflejada en esos momentos líricos, de ensoñación, cuando se pasa de la realidad al recuerdo, lo que pudo ser y no fue..., es un un juego lleno de sabiduría", y concluye: "Es una obra de gran perfección estilística y de una belleza extraordinarias".

De izquierda a derecha: Roberto Quintana, Verónica Forqué, Miguel Narros, Julieta Serrano y Alicia Hermida, intérpretes y director de <i>Doña Rosita la soltera, </i>en un descanso del ensayo.
De izquierda a derecha: Roberto Quintana, Verónica Forqué, Miguel Narros, Julieta Serrano y Alicia Hermida, intérpretes y director de Doña Rosita la soltera, en un descanso del ensayo.LUIS MAGÁN

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_