_
_
_
_
_

Las empresas de telecomunicaciones se ahorrarán impuestos por 8.000 millones

Las pérdidas millonarias de los últimos años les permiten acogerse a créditos fiscales

Ramón Muñoz

Las empresas de telecomunicaciones se van a beneficiar de un considerable ahorro en el pago de impuestos en los próximos años. Las pérdidas millonarias que han sufrido en los últimos ejercicios les permiten acogerse a ventajas fiscales que, en conjunto, le supondrán unas deducciones de más de 8.000 millones de euros. Telefónica encabeza la lista. El año pasado ya se ahorró el pago de 1.176 millones, y aún tiene un crédito fiscal de 5.178 millones. Auna podrá deducir 1.328 millones en los próximos años, y también gozan de esas ventajas Ono, Jazztel o Euskaltel.

La Ley del Impuesto de Sociedades -el que pagan las empresas por sus beneficios- permite a las compañías que sufren pérdidas en un ejercicio compensarlas mediante un menor pago del impuesto en los siguientes años, con un plazo máximo de 15. Es lo que se denomina crédito fiscal.

Las pérdidas multimillonarias que han sufrido en los últimos años las empresas de telecomunicaciones españolas -la mayor parte de ellas nacidas al calor de la liberalización en 1998- han generado grandes créditos fiscales que, con la llegada a los beneficios, supondrán un importante ahorro en el pago de impuestos.

Telefónica va a ser la más beneficiada a costa de las pérdidas netas de 5.576 millones de euros que registró en 2002. Los mayores números rojos de la historia empresarial española se debieron a las inversiones fallidas en la telefonía móvil de tercera generación (UMTS) en Alemania, Italia, Suiza y Austria y las pérdidas en las divisiones de medios de comunicación, datos e Internet.

De hecho, ya en 2003, la operadora se ha ahorrado el pago del impuesto de sociedades, al aplicar una deducción de 1.176 millones de euros, según consta en la memoria remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Aún después de esas deducciones, el grupo tiene un crédito fiscal vivo de 5.178 millones que podrá deducir casi en su integridad a costa de los beneficios en los próximos años.

Auna también va a gozar a partir de este año de un importante respiro fiscal, ya que la antigua Retevisión aún no ha podido aplicarse las deducciones fiscales porque siempre ha tenido pérdidas netas desde su creación en 1998.

No obstante, el segundo operador de telecomunicaciones ya generó en el primer trimestre beneficio neto y cerrará el actual ejercicio con resultados positivos lo que le permitirá aplicarse deducciones del Impuesto de Sociedades en los próximos años por un importe total de 1.328,7 millones de euros, según consta en la memoria correspondiente a 2003.

En menor medida, también se van a beneficiar de los créditos fiscales el resto de las empresas del sector. Así, el operador de cable Ono, que ganó 97 millones de euros en 2003, aplicó un crédito fiscal de 53 millones, y tiene pendiente de aplicar otros 245 millones de euros.

Euskaltel, que también registró ganancias por primera vez en 2003 (200.000 euros), podrá aplicar deducciones por 244 millones por los créditos fiscales acumulados tanto por bases imponibles negativas como por reinversión en nuevos activos.

Jazztel acumula créditos fiscales por 683,1 millones de euros. Sin embargo, la operadora no podrá beneficiarse de los mismos hasta que no comience a tener beneficios lo que, según las previsiones oficiales, no sucederá hasta 2007. Ahora bien el caso Jazztel como el de otras empresas pone de relieve que los créditos fiscales son una ayuda pero no una bicoca.

El caso más paradigmático es el de Terra, la filial de Internet de Telefónica, que tiene acumulados unos créditos fiscales de 995 millones de euros, que serán de muy difícil aplicación, ya que la compañía, ahora integrada en Telefónica y aún en pérdidas, no prevé tener un volumen de beneficios suficiente para devengar la totalidad de esos créditos. En el primer trimestre, ya integrada en el grupo, ha podido deducir un crédito de 10 millones de euros.

Acciona

Pero las empresas deducen fiscalmente por las pérdidas sufridas sino también por las plusvalías. La constructora Acciona ha conseguido ahorrarse en torno a 400 millones de euros en el pago de impuestos por la ganancias que obtuvo de su participación en Vodafone España (la antigua Airtel). La constructora se ha acogido a las deducciones previstas en el Impuesto de Sociedades mediante la reinversión en la compra de otras sociedades por 2.333 millones, un importe muy similar a los fondos que obtuvo con la venta de las participaciones de la compañía de móvil.

La Ley del Impuesto de Sociedades recoge importantes deducciones fiscales para los beneficios empresariales que se reinviertan en la adquisición de activos, siempre que que no se trate de una pura inversión financiera (la compra debe superar el 5% de la sociedad y tener una continuidad). Aunque en la memoria de Acciona no se detalla el ahorro fiscal, se estima que con estas deducciones el tipo impositivo caerá hasta el 18% frente a los 35% que es habitual, con lo que el beneficio fiscal asciende a unos de 400 millones de euros.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ramón Muñoz
Es periodista de la sección de Economía, especializado en Telecomunicaciones y Transporte. Ha desarrollado su carrera en varios medios como Europa Press, El Mundo y ahora EL PAÍS. Es también autor del libro 'España, destino Tercer Mundo'.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_