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La intensidad artística del París de los años 20 llega a Vitoria

La Vital exhibe la muestra 'L'Atelier de Montparnasse'

En los primeros decenios del pasado siglo, París era un hervidero de jóvenes artistas de todo Europa que trataban de enmendar la plana a la tradición. Las vanguardias vivían sus años dorados con la experimentación de Picasso, Modigliani, Man Ray, Matisse, Miro, y tantos otros. La sala de la Fundación Caja Vital de Vitoria presenta hasta el próximo 14 de diciembre L'Atelier de Montparnasse, una selección de la obra de 39 creadores que vivieron y trabajaron en ese barrio de la capital francesa.

En la exposición de la Vital, están las principales referencias de las vanguardias históricas, razón más que suficiente para visitar L'Atelier de Montparnasse. Pero, esta antológica incluye un atractivo añadido: la presentación en sociedad del óleo de Amadeo Modigliani La boutequiére, una pintura que no se exhibía en público desde 1917, fecha de su ejecución. Desde entonces hasta ayer, el cuadro ha permanecido en manos de la familia de la anónima protagonista de este retrato.

Montparnasse fue algo más que una leyenda de París, es el lugar en el que convivieron decenas de creadores que desde el postimpresionismo al cubismo fundaron un espacio de libertad y de reconocimiento del artista individual más que nunca. Allí estaban protagonistas clave de la historia del arte del siglo XX como Matisse, el referente veterano, pero también daba sus primeros pasos Max Jacob, teórico de aquellas vanguardias en las que podía participar un polifacético como Francis Picabia, sin olvidar a un joven Miró, que ya apuntaba maneras surrealistas o a su compatriota Juan Gris, impulsor del cubismo.

Obras de pequeño formato

Estos y otros artistas procedentes de todos los países de Europa deambulaban por un barrio que tenía en La Ruche (conocido también como La Colmena) uno de sus lugares de encuentro. Este antiguo pabellón de vinos, fundado por el escultor Alfred Boucher , era el epicentro de la vida artística y bohemia de la capital francesa. La musa era Kiki de Montparnasse, cuya obra deudora del primitivismo está presente en la exposición de Vitoria. Y en el primer piso, Marie Vassilieff abrió una cantina con la loable intención de alimentar a aquellos hambrientos artistas de vanguardia.

La exposición recoge obra de pequeño formato que en su mayor parte procedente de colecciones privadas, que da idea de las inquietudes de creadores como Jean Cocteau, Robert Delaunay o Fernand Léger. Se aportan algunas esculturas en bronce de Zadkine o Chana Orloff. Y también incluye una serie de retratos de Man Ray a personajes célebres de su tiempo de la entidad de Dalí, Coco Chanel, Giacometti o Matisse.

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