Antonio Altarriba gana el Euskadi de Literatura con una novela de iniciación

Antonio Altarriba (Zaragoza, 1952) se sentó hace diez años a escribir la historia de un moscovita criado en un orfelinato y, cuando acabó, era huérfano, como su protagonista. "La ficción acaba implicándose en tu propia dinámica y afectando a la realidad", dijo ayer en San Sebastián tras proclamarse vencedor del Premio Euskadi de Literatura en Castellano por su novela de iniciación La memoria de la nieve. Koro Navarro ganó en la modalidad de Traducción por Zortzi Kontakizun, su versión de cuentos de Isaac Bashevis Singer.

Altarriba, catedrático de Literatura Francesa de la UPV, guionista, articulista y autor de ensayos y libros de relatos, ha conquistado al jurado con una novela de intriga y espionaje ambientada en la antigua Unión Soviética. Él no la define como un thriller. "Si tuviera que poner una etiqueta a La memoria de la nieve", explicaba ayer, "diría que es una novela de iniciación, porque el protagonista va valiéndose con los años de sus propios recursos, va contemplando los errores del sistema y acaba por confeccionar su propia moral personal".

El escritor cuenta la historia de Víctor, abandonado nada más nacer en las calles nevadas de Moscú y acogido en un inhóspito orfanato estatal. "A través de sus ojos, primero inocentes, más tarde desencantados, Antonio Altarriba nos muestra, con una prosa sumamente elegante, limpia, directa y cálida a la vez, la evolución de una URSS que pasó, en apenas una década, del comunismo más exacerbado a la adopción de un capitalismo que sumió a sus seguidores en la más profunda confusión", ha valorado el jurado. La memoria de la nieve, continúa el tribunal, "conmueve al tiempo que invita a la reflexión más sincera".

Altarriba desarrolló una importante tarea de documentación para escribir este libro. Sólo así, desde el conocimiento, ha podido recrearse con la ficción desde la realidad. En la novela introduce episodios de espionaje que realmente sucedieron en la Unión Soviética y que, curiosamente, los lectores cosnideran inventados. "Es curioso", afirma: "La gente que ha leído la novela me dice que qué imaginación tengo por inventar intrigas tan fantasiosas, pero en realidad, las que pueden parecer más fantásticas son las que realmente ocurrieron". Esta forma de hacer literatura le ha brindado al escritor un premio de 12.000 euros en metálico y una ayuda de otros 3.000 para traducir la novela a otro idioma, posiblemente el francés. Pero para él, el dinero es lo de menos; lo importante es el reconocimiento al trabajo bien hecho. "Considero este premio como el desenlace feliz de esa novela escondida de mis esfuerzos, incidentes y accidentes", señaló.

Altarriba se ha proclamado vencedor en una edición de los premios que ha reconocido a Koro Navarro (San Sebastián, 1955) en la modalidad de traducción por su Zortzi kontakizun, que reúne ocho cuentos del Nobel polaco Isaac Bashevis. "Este autor ha sido un descubrimiento; por eso el premio es aún más grande", señaló Navarro. Los galardones de Literatura en Euskera e Infantil y Juvenil se harán públicos la próxima semana.