_
_
_
_
_

Gas Natural retira la oferta sobre Iberdrola ante la Comisión Nacional de Valores

La empresa gasista y Endesa niegan estar explorando cualquier tipo de alianza

El presidente de Gas Natural, Antoni Brufau, anunció ayer la retirada de su oferta sobre Iberdrola, tras calificar de "sorprendente" y de "misterio" la desautorización de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), que "no cita informes técnicos internos". Por unanimidad, el consejo de administración de la gasista decidió ayer tirar la toalla, aunque encargó a sus juristas que estudien posibles acciones legales, incluido un recurso ante Economía de consecuencias retóricas. Gas Natural y Endesa negaron ayer explorar "cualquier tipo de alianza", en sendos comunicados a la CNMV.

Más información
Las apreciaciones de Economía

Brufau cerró ayer públicamente la carpeta de la fusión con Iberdrola, un fracaso en el que, a su juicio, "sólo ganan quienes son contrarios a la competencia". Lo hizo sin acusaciones de injerencia política, pese al clima de crispación al más alto nivel que, sobre todo en Cataluña, se ha generado con el veto de la CNE a la operación, ya que fueron los miembros de este ente próximos al PP quienes forzaron el veto a la oferta de Gas Natural.

Flanqueado por José Luis López de Silanes, consejero delegado de la empresa que, pese a haber sido designado por Repsol, votó a favor de la OPA, Brufau se limitó a "discrepar" de los argumentos esgrimidos por el órgano presidido por Pedro Meroño, desgranando los suyos y reiterando que "no se han tenido en cuenta ninguna de sus propuestas".

El argumento más "sorprendente" para Gas Natural, que solicita también el desistimiento del expediente de concentración ante el Tribuncal de Defensa de la Competencia, es la preocupación de la CNE sobre una posible reducción del plan de inversiones en distribución eléctrica. La empresa recordó que "comunicó a la CNE que asumía las inversiones" en la red de distribución a tarifa (el mercado regulado): las previstas por Iberdrola (1.588 millones de euros) y las previstas por la propia Gas Natural (1.510 millones) entre 2003 y 2006.

La empresa gasista insistió en que priorizaba estas inversiones de 3.098 millones y en que estaba dispuesta a garantizarlas con avales y con otras fórmulas. Según la documentación entregada por la empresa gasista, la generación de fondos prevista para el nuevo grupo permitía "cubrir cerca de seis veces las inversiones en actividades reguladas".

Brufau destacó que, en 20 días, la CNE admitió hasta tres planes de inversión en distribución eléctrica distintos por parte de Iberdrola, y que asumió el último de ellos, presentado justamente el día en que comenzaban las deliberaciones en el ente regulador. Este último plan elevaba las inversiones de Iberdrola a 1.810 millones, por encima de lo que preveía el plan de Gas Natural. "Nadie nos consultó si estábamos dispuestos a asumir esos 200 millones adicionales". Brufau dijo que no hubiera habido reparo.

Otros de los inconvenientes que destaca la resolución de la CNE son tanto la posible transferencia de rentas entre actividades reguladas y no reguladas, para lo que "no existe ningún argumento de apoyo ni jurídico ni técnico", como las dudas sobr ela estructura financiera de la empresa resultante, punto en el que los fondos propios se situarían en el 30% sobre los fondos totales.

La CNE también cuestionaba el supuesto impacto negativo de las desinversiones para las actividades reguladas. A ello replica Gas Natural que sólo se estaba dispuesto a vender activos a empresas que asegurasen su funcionamiento.

Crecimiento "orgánico"

Tras el desmarque de la CNE, el presidente de la compañía gasista se esforzó por mirar hacia adelante y dibujó un futuro que pasa por "acelerar el crecimiento orgánico" de Gas Natural. Esta apuesta, enfatizó, excluye una alianza de todo tipo con Endesa "a corto, medio o largo plazo".

A diferencia de una unión con Iberdrola, que hubiera "adelantado varios años" el cumplimiento de la estrategia de Gas Natural, una operación con la primera eléctrica española, en la que la que La Caixa controla un 5% del capital, supondría "un cambio de estrategia". Mostrándose, al menos en apariencia, más relajado que en otros actos públicos desde el lanzamiento de la OPA el pasado 10 de marzo, Brufau negó con distintas expresiones que el fracaso de la operación recorte sus expectativas en el cargo.

"Esta transacción la volvería a hacer. Con eso ya estoy diciendo que no me quiero ir", sonrió, tras prometer un "papel clave" en el futuro para López Silanes, a quien Repsol no renovará en el cargo por su voto a favor de la OPA. El responsable del grupo industrial de La Caixa, primer accionista de Gas Natural con un 31% del capital, aseguró que la entidad financiera que dirige Isidre Fainé "soporta" la estrategia del consejo de la gasista y rechazó de plano que ésta y su primer accionista tengan en mente escenarios distintos.

El presidente de La Caixa, Ricard Fornesa admitió ayer contactos con Endesa, que desligó de un alianza alternativa a la de Iberdrola. Fornesa se remitió a los comunicados de ayer y del pasado sábado de La Caixa, en los que ésta asegura "no haber analizado" con Endesa ni con los Gobiernos central y catalán "posibles alianzas o fusión de Gas Natural con Endesa". Gas Natural envió un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en el que excluía conversaciones "preliminares o exploratorias" para realizar alguna operación con Endesa, que también precisó que no hay "planes ni decisones de ninguna clase relativos al sector energético o cualquier tipo de alianza".

Antoni Brufau, durante la rueda de prensa celebrada ayer en Barcelona.
Antoni Brufau, durante la rueda de prensa celebrada ayer en Barcelona.CARLES RIBAS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_