Ricardo Darín y Cecilia Roth evocan la huida de una pareja de desaparecidos

"Ésta no es la historia de unos héroes, es la historia de dos seres que son, como fueron tantos otros, anónimos". Cecilia Roth explicó ayer así Kamchatka, la película de Marcelo Piñeyro que interpreta junto a Ricardo Darín. El filme hispano-argentino transcurre en 1976, tras el golpe militar de Jorge Rafael Videla, y evoca la huida de Buenos Aires de un matrimonio junto a sus dos hijos. Siempre desde la mirada del niño mayor, de 10 años, la película abre, según Darín, "una puerta hacia otro lugar". "Es la mirada de un niño que puede recordar y que recuerda. Eso, pese a todo, es esperanzador", añade Cecilia Roth. El filme se estrena en España este viernes.

Se esperaba el estreno en España de Kamchatka. Por el tema que aborda, por el éxito del filme en su país, por optar a una candidatura al Oscar a la mejor película en habla no inglesa, por el equipo que la ha creado e interpretado y, también, porque su protagonista masculino es Ricardo Darín, el actor de moda en España.

"¡No me digan eso, por favor, me siento pésimo, de verdad!", aseguró ayer el actor. Bien peinado, con camisa blanca y chaqueta negra, Darín ha aterrizado en Madrid rodeado del aura de una estrella. "Yo vengo de un matrimonio de actores muy buenos que no tuvieron suerte. Creo que a mí me ha tocado todo lo que les negaron a ellos. Nunca me he tomado mi trabajo como algo fácil. En un mundo plagado de injusticias yo he tenido todas las oportunidades posibles y, eso sí, las he aprovechado".

Darín explicó por qué pese a la infinidad de propuestas que tiene del cine español permanece en Argentina. "Entiendo que otros actores se vengan a España pero, honestamente, mientras tenga la posibilidad de seguir trabajando en mi país, me quedaré. Argentina está muy mal pero no está muerta, y la única posibilidad que tiene de curarse es que algunos nos quedemos dentro". "En la época de Menem", añadió Cecilia Roth, "me daba vergüenza ser argentina; hoy creo que tengo la responsabilidad de estar en mi país". "La crisis argentina", prosiguió Darín, "tiene ahora cara de economía, pero la crisis más profunda no es la económica. Lo doloroso, lo injusto y lo estúpido es cómo se ha deteriorado el tejido ético, moral y cultural de Argentina".

Marcelo Piñeyro agradeció ayer a la productora española Alquimia y a su productor, Francisco Ramos, "su pasión" por un proyecto que nació en pleno estallido de la crisis. El director y el guionista del filme, Marcelo Figueras, explicaron ayer cómo Kamchatka ("una película sobre la supervivencia, sobre los legados de padres a hijos", explica Piñeyro) ha calado especialmente en el público argentino precisamente por hablar de un momento de máxima violencia ambiental. "Ésta es una película situada en un momento de extremo dolor, que habla del legado ético y moral de toda una generación desaparecida y, casualmente, hemos tenido la necesidad de contarlo ahora. Hay muchas maneras diferentes de ejercer violencia sobre el individuo. Y yo llamo violencia a no poder llevar comida a la boca de tus hijos". "Existe", continuó el guionista del filme, "violencia de Estado, como existe la violencia económica o la violencia del Prestige. Nosotros recuperamos un dolor del pasado. Darle la cara a ese dolor es también una manera de darle la cara al dolor del presente".