Javier Vázquez torea en casa
La terna de este domingo está compuesta por Manolo Sánchez, de Valladolid, de quien todavía se recuerda aquel toreo a la verónica magistral, cuando su presentación de novillero en Las Ventas. Por Alberto Ramírez, que confirmó la alternativa en mayo del año pasado y dejó una grata impresión. Y la completa Javier Vázquez, torero bien conocido por la afición.
El torero que, para más señas, nació en el barrio de Chamberí, toda una identidad. 'Me he preparado mucho para esta ocasión. He estado encerrado en el campo todo el tiempo de atrás. He toreado muchas vacas, algún toro y varios festivales. Lo que hace falta es que un toro me ayude metiendo el morro'.
De que si el torero llamado de Madrid debe tener ciertas cualidades, pues que 'los toreros son de todas partes. Así las cosas, en Madrid gusta el toreo clásico, pero, sobre todo, que haya entrega. Cuando más mande el corazón, tiene que funcionar la cabeza. Después, gustarse. Es un compendio de cualidades. Por encima de todo, la entrega'.
Las claves de su triunfo en San Isidro del año 1993, en el que abrió la puerta grande sin discusión alguna, fueron que 'se unió ese cúmulo de cualidades. Salir entregado y la cabeza clara, muy despejada, para poder conducir los impulsos del corazón. Después, al disfrutar tú, haces a su vez disfrutar a la gente'.
El sentido del temple, que en Javier Vázquez se ha ido matizando con el tiempo, 'empieza por acompañar la embestida y que no te tropiece la muleta. Luego depende del toro y de su arrancada, que sea franca o temperamental. Cuando se entrega en el momento de la arrancada, engancharlo y llevarlo en los flecos de la muleta'.
De los toros de Ramón Flores, cinco han pasado el reconocimiento previo, y traerán más para completar la corrida.
