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Todos los grupos, salvo el PP, censuran la intervención de Merino sobre políticas de empleo

Martínez dice que las palabras del diputado en el Congreso por Córdoba se malinterpretaron

Luis Barbero

PSOE, IU, PA y el grupo mixto se unieron ayer para reclamar que el Parlamento andaluz exprese 'su repulsa institucional' a la intervención, el pasado martes, del popular Rafael Merino en el Congreso de los Diputados en un pleno en el que se debatían tres iniciativas que exigían al Gobierno central el traspaso de las políticas activas de empleo a la comunidad. Merino, diputado del PP por Córdoba, afirmó que 'si el Gobierno de la Junta fuera de otro color, se habría transferido' ya esta competencia a Andalucía. La presidenta regional del PP, Teófila Martínez, dijo ayer que la frase ha sido malinterpretada.

El Gobierno andaluz, cuatro grupos parlamentarios y Comisiones Obreras replicaron ayer con dureza la intervención de Merino. Los socialistas consideran que las palabras del diputado del PP avalan la teoría que mantienen desde hace meses, es decir, que Andalucía no ha recibido aún esta competencia por una decisión partidista del Ejecutivo central.

Ayer mismo, el PSOE promovió y acordó con Izquierda Unida, Partido Andalucista y el grupo mixto dar una respuesta institucional y urgente a las afirmaciones de Merino. Así, los cuatro grupos propusieron al presidente del Parlamento, Javier Torres Vela, celebrar hoy una sesión extraordinaria de la Junta de Portavoces para que la Cámara exprese 'su repulsa institucional' a las declaraciones de Merino. Esta reunión de la Junta de Portavoces estaba pendiente, al cierre de esta edición, de encontrar un hueco para su celebración, ya que hoy continúa la sesión plenaria de la Cámara que empezó ayer por la tarde.

Los cuatro grupos entienden que la gravedad de las palabras del diputado del PP merecen una réplica del Parlamento, que ha aprobado varias resoluciones reclamando el traspaso de esta competencia, a las que también se han sumado los populares.

Precisamente, la polémica intervención de Merino se produjo mientras el Congreso de los Diputados debatía tres iniciativas que exigían la transferencia inmediata de estas competencias a la comunidad. El PP rechazó con su mayoría absoluta, pero en solitario, esta demanda.

Los cuatro grupos que apoyan la iniciativa hicieron público ayer por la tarde un comunicado en el que se destaca que 'son inadmisibles y escandalosos los argumentos esgrimidos por el diputado popular'. Añaden que las declaraciones de Merino 'rompen con la lealtad institucional, son predemocráticas y contrarias al espíritu y la letra de la Constitución española y del Estatuto de Autonomía'. Y, por último, solicitan al PP andaluz que desautorice las palabras de Merino y recomiendan a éste 'que sea coherente y que se plantee su continuidad como representante del pueblo andaluz' en el Congreso de los Diputados.

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El portavoz parlamentario del PSOE, José Caballos, aseguró que la intervención de Merino en el Congreso pone de relieve la 'concepción clientelar del Estado' que tiene el PP, así como su mentalidad 'centralista e imperial'. A estas críticas se sumaron el sindicato Comisiones Obreras, que tildó de inadmisible la afirmación del diputado del PP, y el consejero de Empleo, José Antonio Viera, quien acusó al Gobierno central de actuar 'con desfachatez y cinismo político' en el regateo de la negociación para traspasar las políticas activas de empleo a Andalucía.

La dirección del PP andaluz intentó quitar hierro las afirmaciones de Merino. Teófila Martínez dijo que Merino quiso decir que el Gobierno andaluz 'no está haciendo nada para llegar a acuerdos porque le interesa la confrontación', informa Efe. Martínez añadió que 'probablemente se pudieron malinterpretar' las palabras del diputado popular. La presidenta del PP añadió que la intención del diputado cordobés era recordar que cuando gobernaba el PSOE en España y Andalucía, el presidente de la Junta, Manuel Chaves, no hacía 'ningún tipo de reclamaciones'. Más contundente fue Merino, quien dijo que sus palabras han sido 'manipuladas'. El diputado del PP dijo que, con sus palabras, quiso decir que la Junta es la que está entorpeciendo la negociación del traspaso.

Polémica intervención

El acta del Congreso de los Diputados sobre el debate recoge las siguientes frases de Rafael Merino que han suscitado la polémica: 'Decía el portavoz del grupo socialista que, si el Gobierno de la Junta fuera de otro color, se habría transferido. Estoy convencido de ello. Si no fuera del partido socialista haciendo oposición al Gobierno del PP, estarían transferidas las competencias, porque se habría llegado a un acuerdo'. 'Lo que ustedes están pidiendo en sus proposiciones es una ilegalidad y atenta contra el espíritu autonomista de nuestro Estado de derecho. El Gobierno no puede hacerlo si no hay un acuerdo de la comisión mixta de transferencias.' 'Nosotros queremos que se transfieran las políticas activas de empleo; de verdad lo queremos como andaluces. Pero queremos que la Junta de Andalucía defienda los intereses de los andaluces en su globalidad, y que no actúe de forma partidista, como hace el Gobierno de la Junta de Andalucía; que no utilice cualquier cuestión como elemento de presión al Gobierno de España'.

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Sobre la firma

Luis Barbero
Es subdirector de Actualidad de EL PAÍS, donde ha desarrollado toda su carrera profesional. Ha sido delegado en Andalucía, corresponsal en Miami, redactor jefe de Edición y ha tenido puestos de responsabilidad en distintas secciones del periódico.

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