_
_
_
_
_
Reportaje:

La cirugía del fútbol de élite se extiende al pueblo llano

Un albañil accidentado en el tajo recibe en el Gregorio Marañón el primer trasplante de menisco hecho en un hospital público

Oriol Güell

Álvaro Benito, un interior zurdo del Real Madrid de la misma quinta que Raúl y Guti, vio truncada su carrera hacia la élite en un partido internacional de la selección española sub 21. Fue en 1996, cuando tenía 19 años. El partido se jugó en Las Palmas contra Eslovaquia. Álvaro chocó contra un rival, su pie se clavó en el césped y la rodilla no resistió el tirón. El menisco de la rodilla izquierda -un cartílago que hay entre el fémur y la tibia que amortigua el roce entre ambos hue-sos- pagó las consecuencias. 'Es algo a lo que estás expuesto. Te puede pasar, pero a mí me costó tres años de inactividad', explica Álvaro, que hoy ya entrena con normalidad.

En 1994, dos años antes de la lesión de Álvaro, Mariano Ayuso, de 44 años, albañil de Villarejo de Salvanés, casado y con dos hijas, se precipitó desde tres metros de altura mientras colocaba tela asfáltica en un torreón. Se fracturó los dos pies y el menisco interno de la pierna izquierda. 'Estuve seis meses recuperándome de los pies, y cuando al fin empecé a andar, surgieron los problemas de rodilla. Notaba el roce del fémur con la tibia. El dolor era insoportable y la rodilla se me hinchaba como un balón. Llegué a llorar como un niño', explicó ayer Mariano, pocas horas después de ser intervenido.

La cirugía de la élite futbolística y la de la sanidad pública se dieron ayer la mano en el hospital Gregorio Marañón. En realidad, un solo par de manos sirvió de puente: las de Alfonso del Corral, director médico del Real Madrid. Del Corral, junto a Javier Vaquero Martín y Carlos Luis Vidal, del equipo de traumatología del hospital, y Pedro Ripoll, especialista del hospital San Carlos de Murcia, realizó el primer trasplante de menisco de la sanidad pública madrileña.

Calidad de vida

Hasta ahora los afectados tenían dos opciones: acudir a la medicina privada o viajar a Estados Unidos. El futbolista Álvaro podía permitírselas. Mariano no. El primer trasplante de menisco de España lo hizo este equipo médico hace menos de un año en Murcia. Desde entonces, en España no se han hecho más de 20 trasplantes.

'Es una operación que multiplica la calidad de vida de los pacientes. Con la lesión de menisco, Álvaro no podía ni tomarse una cerveza con sus amigos, pero hoy juega al fútbol sin ningún problema. Ése es, salvo complicaciones improbables, el futuro de Mariano', explica el doctor Del Corral tras la intervención.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Álvaro estuvo tres años tratando de que su rodilla volviera a ser la misma. 'Me operaron con otro método, pero no funcionó. Es más, empeoró las cosas, porque me cambió la forma de pisar y la de la rodilla', recuerda el jugador. Álvaro ya estaba al borde de la desesperación cuando Del Corral se lo llevó al hospital de la Universidad de Pittsburg, en Estados Unidos. Allí, viendo cómo operaban a Álvaro, Del Corral aprendió cómo hacerlo.

'Es una técnica compleja, pero cuando los médicos están formados, su coste es el de cualquier otra operación', explica Javier Vaquero, del Servicio de Traumatología del Gregorio Marañón. El equipo médico destacó que gracias al 'excelente banco de tejidos del Gregorio Marañón, el trasplante de menisco podrá extenderse en el futuro'.

Calmantes y paciencia

Mariano Ayuso, que admite que no es muy aficionado a hacer deporte, recuerda como un 'infierno los siete años de dolor' que ha pasado. Sin embargo, le duele aún más no haber podido jugar con sus dos hijas, que ahora tienen 15 y 12 años. 'Hasta ahora, en el centro de salud y en el hospital sólo me proponían dos remedios: calmantes y paciencia', lamenta.

La recuperación, según los médicos, será relativamente rápida: 'En una semana deberá empezar a hacer algún movimiento. Luego le quedarán dos meses de muletas y rehabilitación. En tres meses ya podrá hacer vida normal', explicó Del Corral. En el caso de los deportistas de élite, que en periodo de descanso pierden la fuerza de su sólida masa muscular, la recuperación se prolonga hasta los ocho meses para 'estar al cien por cien'.

Mariano se beneficiará de otro avance técnico, ya consolidado en la sanidad pública desde hace años: la artroscopia. Esta técnica evita abrir una extensa herida en la rodilla operada, lo que alargaría la recuperación, aumentaría el dolor y multiplicaría el riesgo de infección. Con la artroscopia, los médicos hacen dos agujeros: uno a cada lado de la rodilla. Por el primer orificio se introduce una pequeña cámara que permite ser testigo de lo que ocurre en el interior de la rodilla. Por el segundo se realiza la intervención, en este caso la extracción de los fragmentos del menisco dañado, y la introducción del nuevo.

Álvaro Benito tiene hoy 24 años y entrena firme para acabar la temporada con el Real Madrid B. Tras cinco años de problemas (sufrió un accidente de coche que empeoró el estado de su rodilla) debe convencerse ahora de que puede ser el crack que el club blanco esperaba de él. Por su parte, Mariano sigue en el hopital, recuperándose de la operación. Pero ya sueña con retomar su afición favorita: los largos paseos con su mujer. 'Estaba desesperado', confiesa, porque 'creí que no podría volver a darlos'.

El médico del Real Madrid

El menisco es un cartílago con forma de media luna que amortigua el movimiento y el roce entre la tibia y el fémur, los dos grandes huesos que se encuentran en la rodilla, según explicaron los médicos que ayer llevaron a cabo el primer trasplante de este tejido que ha hecho un hospital público en la región (en este caso en el Gregorio Marañón). Cada rodilla tiene dos meniscos: el interno y el externo, según el lado de la articulación que ocupen. De unos cuatro centímetros de largo y un grosor de dos, está formado por un tejido cartilaginoso muy blando pero muy resistente. Con la edad, el menisco se vuelve más frágil y hasta lesiones leves pueden dañarlo en personas de edad avanzada. Sin embargo, en gente joven, cuando el menisco se daña es que la lesión ha sido grave. Además, la mayor parte del menisco no tiene circulación de sangre, por lo que es incapaz de repararse a sí mismo y hay que recurrir a la cirugía para retirar la parte dañada. 'Un menisco dañado augura la aparición de la artrosis en edades muy jóvenes', explica Alfonso del Corral, director médico del Real Madrid y uno de los facultativos que intervino en la operación. 'Una artrosis a los 40 años supone una pérdida de calidad de vida enorme para el paciente, que sufrirá dolores muy intensos por el mero hecho de caminar o estar de pie durante el resto de su vida', añadió Del Corral.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_