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Viera plantea a trabajadores de Boliden que creen una cooperativa para captar obras de restauración ambiental

Los sindicatos exigen un calendario para las recolocaciones y un plan de prejubilaciones

Alejandro Bolaños

El consejero de Empleo, José Antonio Viera, propuso ayer a representantes de los 425 trabajadores de Boliden Apirsa, la propietaria de la mina donde se originó en 1998 el vertido tóxico sobre el valle del Guadiamar, que formen una cooperativa a la que la Administración autonómica daría 'prioridad' en obras de restauración ambiental. También podrían asumir tareas de vigilancia del plan de abandono y clausura de la explotación, que la Junta tendrá que afrontar si la Boliden, en suspensión de pagos, no lo hace. Viera calculó que esta iniciativa podría dar trabajo a un centenar de empleados.

Los sindicatos valoraron la propuesta de Viera de subcontratar a trabajadores de Boliden Apirsa para las obras de restauración incluidas en el proyecto de corredor verde que la Junta impulsa en el valle del Guadiamar, o incluso, para las tareas de clausura de la explotación minera. Pero fuentes del comité de empresa también consideraron 'limitada' esta medida, recordaron que este tipo de trabajo puede acabarse 'en cuatro o cinco años' y dijeron preferir que los empleados sean contratados por empresas antes que tener que crear una cooperativa.

La propuesta a los trabajadores de que formen una cooperativa para asumir este tipo de obras es una de las medidas incluidas en el plan autonómico para la recuperación de la comarca de Aznalcóllar. De hecho, ayer el Consejo de Gobierno de la Junta aprobó la extensión de la Zona de Acción Especial (ZAE) de la faja pirítica onubense a los ocho municipios sevillanos más afectados por el cese de actividad en la explotación minera de Boliden Apirsa. Esta decisión permitirá a Empleo agilizar la aplicación del plan de diversificación.

La Consejería de Empleo ya ha anunciado que facilitará a los trabajadores de la explotación becas-salario de 75.000 pesetas mensuales para paliar la pérdida de renta y que subvencionará con un millón de pesetas a las empresas instaladas en la comarca que recoloquen a cualquiera de los 425 empleados afectados. El Instituto de Fomento de Andalucía también prevé adquirir suelo para crear un parque industrial y que la comarca se convierta en un nudo de transportes de mercancía por carretera.

Viera se reunió ayer con el delegado del Gobierno central en Andalucía, José Torres Hurtado y representantes del comité de empresa de Boliden Apirsa. Los sindicatos, apremiados por la próxima resolución del expediente de extinción de empleos (el 31 de diciembre),requirieron una respuesta rápida a sus principales requerimientos y arrancaron de las Administraciones una nueva reunión el viernes en las que concretarán si aceptan estas reivindicaciones.

Los representantes de los trabajadores quieren que se apliquen en Aznalcóllar medidas similares a las que se han utilizado en la minería del carbón para mitigar los efectos sociales y económicos de los cierres de explotaciones. En concreto, los sindicatos pretenden que se garantice a los empleados la posibilidad de cobrar el subsidio de desempleo durante 24 meses y que, al calcular el tiempo de trabajo acumulado, se utilicen coeficientes reductores que permitan adelantar la edad de jubilación.

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Torres Hurtado aseguró que este viernes el Ministerio de Trabajo dará respuesta a estas reclamaciones. Los trabajadores también quieren pactar con las Administraciones un calendario de recolocaciones y la negociación de un plan de jubilaciones anticipadas para los trabajadores mayores de 50 años, que afectaría a cerca de la mitad de la plantilla.

Paro en Aznalcóllar

Los sindicatos decidieron aparcar la petición a las Administraciones de que garanticen de algún modo el pago de las indemnizaciones pactadas con la empresa. Boliden Apirsa ha acordado con los trabajadores el pago de un máximo de 45 días por año trabajado, pero ha dividido el compromiso en dos plazos: uno en enero de 2002 y otro tres años después. UGT y CC OO quieren que las Administraciones anticipen este segundo pago.

La reunión estuvo precedida de un paro general en Aznalcóllar por la mañana y coincidió con la manifestación de 300 trabajadores de la empresa en las calles de Sevilla.

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