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El Gobierno paraliza la quema de plástico en la cementera de Morata

La consejería alega 'razones sociales'

La cementera Portland de Morata no quemará residuos tóxicos para alimentar sus hornos. El consejero de Medio Ambiente, Pedro Calvo, aseguró ayer que había llegado a un acuerdo con los máximos responsables de esta empresa para que retiren el proyecto de incineración. Medio Ambiente, sin embargo, no se opone a la construcción de una planta energética de ciclo combinado también en Morata. Calvo cree que con aumentar los controles sobre ella será suficiente.

Medio Ambiente considera que dos nuevos focos emisores de sustancias contaminantes sobre Morata de Tajuña son excesivos. En la actualidad existe un proyecto para incinerar residuos tóxicos en la cementera de Portland-Valderribas y otro para construir una central eléctrica de ciclo combinado (combustión de gas y gasóleo) en el mismo municipio. Por ello, el vecindario se muestra preocupado y ha organizado manifestaciones de protesta.

Pedro Calvo, consejero de Medio Ambiente, afirmó ayer que, si bien ambas industrias podrían conseguir una declaración de impacto ambiental positiva, 'es necesario priorizar las necesidades sociales de la zona'. El consejero ha pedido a los responsables de la cementera que retiren el proyecto de incineración de residuos tóxicos. Un portavoz de Portland-Valderribas admitió que la empresa lo 'está reconsiderando'.

El proyecto de Portland, denominado Valorización energética de residuos de la cementera El Alto, de Morata de Tajuña, preveía que en la planta se quemasen restos plásticos (PVC) de vehículos de desguace, así como neumáticos y aceites industriales. La empresa conseguiría de esta manera, a bajo precio, la potencia calorífica suficiente (1.200 grados) para fabricar cemento y se ahorraría costes en el proceso de fabricación. Tenía previsto sustituir el 40% del combustible que consume actualmente por incineración de los productos industriales. Pero ahora, tras la petición de Medio Ambiente, el proyecto ha quedado en suspenso.

1.200 megavatios

Sin embargo, el proyecto de construir una central eléctrica de ciclo combinado en Morata de Tajuña sigue adelante. Se trata de un planta, promovida por la empresa Entergy, que producirá una potencia de 1.200 megavatios y que empleará para su generación gas natural y gasóleo. Ocupará 11 hectáreas del término y contará con tres chimeneas de 60 metros. Por ella saldrán óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono, vapor de agua y, en menor medida, compuestos orgánicos volátiles.

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La consejería, que ha presentado alegaciones contra estas intalaciones que aún deben ser analizadas por el Ministerio de Medio Ambiente, cree que esta central térmica sí es compatible con el medio natural. Pero reclama al ministerio que le imponga fuertes restricciones en el control de las emisiones contaminantes.

La principal es que la consejería disponga de información pormenorizada de todas las emisiones de la planta. En sus alegaciones, Medio Ambiente exige 'un control mensual de los mecanismos instalados para la reducción de la emisión de los óxidos de nitrógeno' y un control en continuo de las emisiones de anhídrido carbónico, partículas y compuestos orgánicos.

Alarma en 10 minutos

Además, 'y con el fin de que la Comunidad de Madrid pueda tener un conocimiento adecuado de la evolución de emisiones, el promotor instalará un sistema para almacenar los datos objeto de control'. En caso de superación de los límites de emisión, 'el sistema generará una alarma que será notificada a la Consejería de Medio Ambiente en un plazo de diez minutos'. La consejería teme que un aumento en exceso de los óxidos de nitrógeno, precursores del ozono troposférico, pueda provocar 'episodios de altos niveles de ozono'.

El sistema de control exigido deberá situar su base en 'las dependencias de la propia consejería', de tal manera que Medio Ambiente controle, 'cuando lo considere oportuno', según explicó ayer Pedro Calvo, las emisiones de la central térmica, sin tener que depender de los análisis o comprobaciones del promotor.

La declaración de impacto de esta planta, que está realizando el Ministerio de Medio Ambiente, estará acabada antes fin de año.

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