El Ayuntamiento niega que Hacienda haya cuestionado la gestión del Imefe
El Ayuntamiento de Madrid ha salido al paso del informe provisional de la Intervención General del Estado sobre el Instituto Municipal de Empleo (Imefe), en el que el organismo dependiente del Ministerio de Hacienda considera improcentes gastos del Imefe por más de 1.200 millones de pesetas, acogidos a subvenciones de la UE, por no estar justificados con facturas o por derivar de costes propios del instituto (edificios o personal). Asimismo, el órgano fiscalizador aprecia 'coincidencias' en los beneficiarios de las subvenciones europeas. El informe fue elaborado el pasado mes de mayo y se refiere al periodo 1994-1997.
Como respuesta, el equipo de gobierno que preside José María Álvarez del Manzano emitió ayer una nota en la que asegura que la Intervención General del Estado 'critica la forma, pero no el fondo de la gestión del organismo'. El Consistorio rebate las acusaciones de los grupos de la oposición -que ayer solicitaron el cese del equipo gestor del instituto, empezando por su presidenta, María Antonia Suárez, y una investigación del interventor municipal sobre este asunto- y las califica de 'apresuradas, ya que el informe aún es provisional'.
Según la nota del Ayuntamiento, en el informe provisional del organismo fiscalizador 'en ningún momento se habla de irregularidades, sino de la utilización de algunas partidas con carácter de elegibles (subvencionables) que el Fondo Social Europeo entiende que no lo son'. Añade que esto no significa que haya irregularidad, sino una simple interpretación de concepto, al tiempo que subraya el carácter de 'apresurada' de cualquier valoración antes de la emisión del informe definitivo de la intervención.
PSOE e IU, por su parte, han asegurado que la Intervención General 'viene a dar la razón punto por punto' a las irregularidades denunciadas en marzo pasado cuando se abrió una comisión de investigación sobre el sexenio 1994-99. la oposición destapó que varias empresas cobraron al Imefe por cursos de formación a parados y reclusos que nunca se impartieron. El escándalo le costó el cargo al entonces gerente del Imefe, Ricardo Peydró.
