El Formidable se recupera de sus graves cornadas
A los tres surcos, uno por cada cornada, que recorren el cuerpo de Juan Carlos de los Ríos, se suma ahora una fractura en el dedo índice de la mano izquierda. 'En Madrid no valen las medias tintas', comenta El Formidable, sereno, incómodo y con el voluminoso cuerpo abierto en mil pesares, desde la clínica de la Fraternidad donde se recupera de las gravísimas cornadas con las que le hirió el sobrero de Diego de la Puerta el domingo.
Ocurrió al salir del embroque del segundo par de banderillas con el que hacía cuarto de una corrida dura y bronca. De los Ríos fue levantado en volandas, tres veces corneado y posteriormente arrojado al suelo. Del golpe quedó una conmoción cerebral ('fue una paliza terrible, me duele todo'). La operación duró dos horas; 120 minutos para coser tres vías de 15, 25 y 30 centímetros. Ahora, el banderillero de la cuadrilla de Pepín Jiménez se recupera. 'Parece que la cosa va mejor y que aún estaré ingresado entre ocho y 10 días'. Con esta cogida, El Formidable, de 32 años, vuelve a encontrarse con la mala fortuna en poco menos de tres meses.