Corretja pierde una gran oportunidad ante el ruso Safin
La situación de Àlex Corretja en el Masters de tenis, que se disputa en Lisboa, se complicó ayer de manera incomprensible en su debú. El número uno español perdió frente al ruso Marat Safin, el número uno mundial, por 7-6 (8-6), 5-7 y 3-6 en dos horas y 33 minutos, dejando escapar una gran oportunidad de encarrilar su clasificación para las semifinales. Corretja llegó a sacar para ganar el partido en la segunda manga, cuando llevaba un 5-4 a su favor. Pero, en ese momento tan crucial, su cabeza se fue por otros derroteros -probablemente, a la final de la Copa Davis, que se jugará el próximo fin de semana en Barcelona- y su tenis desapareció como por arte de magia. Corretja perdió siete juegos consecutivos, cedió el set y se vio de pronto dominado en el tercero por 3-0.Hasta que llegó aquel fatídico momento, Corretja consiguió exasperar a Safin. El ruso, de 20 años, debe defender su liderato mundial, amenazado ya solamente por el brasileño Guga Kuerten -ayer quedó descartado el estadounidense Pete Sampras- en este último torneo del año y cada derrota le duele como si le arrancaran una muela. Su grado de irritación fue tal que, tras perder su saque en el quinto juego de la segunda manga, dirigió una mirada de las que funden y algunas palabras a su entrenador, el valenciano Rafael Mensua, y tiró con rabia la raqueta sobre su bolsa. "Me estaba dando cuenta de que el partido se me iba", confesó Safín; "pero no estaba dispuesto a dejar esa imagen. Un número uno no puede jugar tal como yo lo hacía, no puede cometer tantos errores. Al menos, debía luchar y demostrar que quiero seguir siéndolo. Mensua es mi escapatoria, pero le necesito a mi lado".
El partido tuvo fases de gran calidad en el primer set, cuando Corretja y Safin ganaban los puntos más que los perdían. Fue entonces cuando el español certificó que su nivel actual es el que demuestra su clasificación mundial, el séptimo. Da lo mismo que sea en superficie rápida, en pista cubierta o en tierra batida, juega como un top-ten: atacando la bola, ganando puntos con el saque y restando con riesgo. Lo único que le falta es continuidad. Debe acabar de acostumbrarse a este nuevo ritmo de juego.
Ése fue el motivo fundamental por el que perdió. Tuvo la segunda manga a tiro (5-3, 5-4 y saque), pero, cuando debía decidirla, no logró colocar ni un primer servicio, se descentró y se agobió viendo cómo perdía su oportunidad: concedió siete juegos consecutivos en los que sólo se anotó seis puntos. Y de poder ganar el partido en dos sets pasó a verse dominado por 3-0 en el tercero y definitivo.
"La cuestión", dijo el barcelonés, "es que cuando juegas contra Safin no puedes bajar tu nivel ni un momento. Me desconcentré y él ya no me dio más oportunidades. Lo bueno fue que jugué a un gran nivel y que tuve una oportunidad para ganar al número uno. Lo malo, que la dejé escapar. Es la segunda vez esta temporada que pierdo un partido en el que he sacado para ganar. Y he ganado más de 60. No es un mal balance". De todas formas, Corretja aún puede clasificarse para las semifinales. Para ello deberá derrotar a Sampras, hoy, y al australiano Lleyton Hewitt.
En los otros dos partidos de ayer, Hewitt, el australiano que la próxima semana se enfrentará a España en la Copa Davis, causó sensación al derrotar a Sampras. Le endosó un 7-5 y 6-0. Por su parte, el norteamericano Agassi superó al brasileño Kuerten, que tenía molestias físicas, en algo menos de dos horas por 4-6, 6-4 y 6-3.
