EL FÚTBOL, DEPORTE DE RIESGO EN AFGANISTÁN
Utilizar pantalones cortos para practicar deporte no es una buena idea en Afganistán. El pasado sábado, el régimen de la milicia integrista islámica talibán, que controla el 85% del país, arrestó y ordenó rapar la cabeza a una docena de futbolistas paquistaníes por violar los códigos de conducta musulmana al osar mostrar sus piernas. El arresto se produjo en el estadio deportivo de Kandahar, cuartel general de la milicia talibán, en el descanso del partido que enfrentaba a conjuntos de Afganistán y Pakistán. Cinco de los 17 jugadores del equipo visitante lograron escapar y uno de ellos alcanzó a buscar refugio en el consulado de su país en la ciudad. Desprovistos ya de melena, los atrevidos exhibicionistas fueron liberados el domingo. Según el diario paquistaní El Jang, el altercado generó una avalancha en el estadio con un balance final de 20 heridos. El gobernador talibán de Kandahar, Maulvi Mohamed Hasan, pidió finalmente disculpas por el incidente: "Eran nuestros invitados y no merecían este trato", se disculpó.-
