Setenta manifestantes contra la exclusión social recorren el distrito Centro
La cuarta jornada de la III Semana de Lucha Social, organizada por grupos de barrio, okupas, feministas y ecologistas para protestar contra la exclusión social, transcurrió ayer sin incidentes. Unos setenta manifestantes recorrieron el distrito Centro, parando delante de entidades a las que resposabilizan de la pobreza en el Tercer Mundo, como la Casa de América, el Banco Central Hispano y Telefónica. Diez furgonetas de antidisturbios siguieron a la comitiva. La protesta comenzó a las 10.30 en Cibeles. Intentaron colocar una pancarta en la verja de la Casa de América en la que se leía "Casa de América, Foro de genocidas, los pueblos de América Latina ni olvidan ni perdonan". Critican que se invite a este recinto a mandatarios latinoamericanos a los que culpan de la pobreza de sus pueblos. La policía impidió la colocación de la pancarta. Los manifestantes siguieron hasta la calle Prim, donde se encuentra la Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional, donde ayer se veía la impugnación del sindicato anarquista CGT, que apoya esta Semana de Lucha Social, contra un convenio de telemárketing firmado por las centrales mayoritarias.
El siguiente punto de encuentro era la Puerta del Sol. A las 12.15, cinco manifestantes entraron al Banco Central Hispano de Alcalá, 12 para repartir panfletos en los que se criticaba la actuación de las entidades financieras españolas en Latinoamérica. El resto les esperó fuera coreando consignas como "Este banco huele a sangre".
La siguiente cita, frente a la sede de Telefónica de Gran Vía, donde gritaron: "Aquí está la cueva de Alí Babá". De allí marcharon en pequeños grupos hasta la plaza de los Cubos, donde les esperaban ya varias unidades de antidisturbios. Varios manifestantes llegaron con una cacerola con alubias, que devoraron mientras repartían octavillas contra la comida basura y los alimentos transgénicos. El lugar lo eligieron porque en él se encuentran varios restaurantes de comida rápida.
