Cataluña evaluará el nivel escolar de los alumnos de 10 y 14 años

El Departamento de Enseñanza de la Generalitat evaluará a los alumnos de 10 y 14 años para conocer su grado de "adquisición de las competencias básicas" y evitar el fracaso escolar. Enseñanza facilitará las pruebas estandarizadas que deberán pasar los alumnos, y cuyos resultados permitirán a los centros escolares de Cataluña saber su nivel respecto a los restantes y determinar si es necesario tomar decisiones de mejora o cambio en la gestión de los currículos y métodos de aprendizaje.Durante este curso se realizará la primera evaluación a los alumnos de 10 años (que estudian 4º de primaria, que tiene seis cursos) y el próximo curso se hará a los de 14 años (que estudian 2º de ESO, que tiene cuatro cursos). Esta iniciativa es una de las principales modificaciones que la Generalitat ha introducido en el sistema educativo para el próximo curso.

La consejera de Enseñanza, Carme Laura Gil, insistió ayer en que las pruebas de evaluación interna de los centros "no tienen nada que ver con la antigua reválida, porque no se trata de un examen externo ni tiene por finalidad seleccionar a unas élites. Se trata de una observación y diagnóstico del progreso del alumno en el aprendizaje", dijo. Gil añadió que los cambios presentados para la enseñanza primaria y secundaria "no representan una reforma de la reforma" educativa.

Para mejorar la evaluación de la calidad de la docencia, Enseñanza prevé que cada centro elabore planes estratégicos, que el próximo curso ya tendrán 100 escuelas e institutos. Otra de las novedades es que el aprendizaje de la lectura y la escritura comenzará ahora a los 5 años en lugar de a los 6. En secundaria se fija "una asignación obligatoria del tiempo disponible en la franja variable del currículo, que garantiza tres horas semanales de catalán, castellano, matemáticas, historia e idioma extranjero".

La consejera anunció un plan de choque para erradicar en dos años y medio el 80% de los barracones que hay en escuelas e institutos de Cataluña, aunque no precisó el coste de la operación ni si hay partidas para ejecutarla.