El PSOE aplaza el debate sobre la incorporación del "apellido" Progresista en las listas andaluzas

El PSOE andaluz dejará pasar unos días antes de decidir si concurre a las elecciones autonómicas con el adjetivo Progresistas, como sí acordó el comité federal para las elecciones legislativas. Aunque la nueva denominación no provoca ningún entusiasmo, la dirección regional va a seguir las instrucciones de su secretario general, Manuel Chaves, de que corra el calendario y tomar la decisión en frío y no como una reacción a las directrices federales. El debate surgirá probablemente en el proceso de elaboración de candidaturas que empezó ayer en la mayoría de las agrupaciones. En Málaga, la consejera de Economía, Magdalena Álvarez, ha mostrado su disposición a encabezar la lista autonómica.

La decisión del comité federal, a propuesta del candidato a la presidencia del Gobierno, Joaquín Almunia, de acudir con el nombre de PSOE-Progresistas a las elecciones al Congreso y Senado, sorprendió a los socialistas andaluces presentes en ese órgano, la mayoría de los cuales se enteró la víspera de las intenciones del secretario general.En principio, la denominación no gusta en la federación andaluza, cuyos principales dirigentes se mostraron contrarios a utilizarla en las elecciones municipales, pese a que entonces en algunas capitales, como Cádiz y Málaga, se formalizaron coaliciones políticas que no jurídicas con Nueva Izquierda. En esta ocasión, no se trata de asociarse con otro partido, sino de incorporar a independientes en sus candidaturas, proceso que, en el caso de Andalucía, ya estaba en marcha.

El secretario de Organización del PSOE andaluz, Luis Pizarro, afirmó ayer que no ha habido debate en la ejecutiva regional sobre este asunto, por lo que no habrá un pronunciamiento hasta entonces. En cualquier caso, la propuesta de acordarse debe ser ratificada por el comité director, el máximo órgano de decisión entre congresos, que se celebrará el próximo 17 de diciembre. La mayoría de los dirigentes socialistas consultados se muestran contrarios a adjetivar sus siglas con la palabra Progresistas, por considerar que no aporta ni supone un plus para el PSOE de Andalucía, una marca que consideran muy sólida, "aceptada y aceptable". Además, ningún miembro destacado del PSOE ha hecho bandera de la propuesta aprobada por sus compañeros de Madrid y tampoco pasaba por la cabeza de la dirección abrir un debate sobre este tema.

El secretario general y presidente de la Junta, Manuel Chaves, ha aconsejado no tomar una decisión en caliente, ni que haya pronunciamientos sobre la decisión del comité federal, toda vez que ya está aprobada. Chaves, según fuentes próximas, ha pedido que se "reflexione conjuntamente" en el seno de la dirección andaluza, lo que algunos interpretan como una orden para que no se abra una polémica estéril, hasta que se trate en el pleno de la ejecutiva regional a finales de esta semana o principios de la próxima.

Las listas

El inesperado debate coincide con el inicio en la mayoría de las agrupaciones del proceso de elaboración de candidaturas. En Málaga, Magdalena Álvarez ha aceptado ser la número uno de la lista al Parlamento autonómico, tras mantener una conversación con el secretario de los socialistas malagueños, José Asenjo, quien mostró ayer en la ejecutiva provincial su apoyo a la consejera de Economía para que encabece esta candidatura.

El PSOE ha puesto en marcha las asambleas que decidirán sus listas al Parlamento de Andalucía, el Congreso y el Senado. Asenjo sería el número dos de la lista malagueña, en la que se dan como seguros el vicepresidente del Parlamento Rafael Centeno y el consejero de Agricultura Paulino Plata. Sin embargo, la colocación de éstos en la candidatura dependerá de los puestos ocupados por mujeres.

La vicesecretaria general del PSOE en Málaga, Carmen Olmedo, podría ir en esta lista de las autonómicas, pero también en la candidatura al Congreso, en donde tres de los cinco diputados socialistas no van a repetir previsiblemente: Cristina Alberdi, Dolores Sánchez y Juan Miguel Rodríguez.

Asenjo defendió el principio de la "unidad" para dar a entender que apoya la continuidad de Carlos Sanjuán como diputado en el Congreso. Otros criterios enunciados por el vicesecretario general del PSOE andaluz fueron "una amplia presencia de mujeres, renovación, proyección social de los candidatos y evitar la duplicidad de cargos públicos". Asenjo se sirvió de este último argumento para criticar "la triple función de Celia Villalobos (PP), que ejerce de alcaldesa de Málaga, diputada en el Congreso y portavoz de Telefónica".