Almunia acusa a Aznar de haber recuperado "la peor oposición del PP" para atacarle
El líder del PSOE, Joaquín Almunia, acusó ayer al Gobierno de José María Aznar de haber regresado a la crispación política de la anterior legislatura. "Me recuerdan a la peor oposición que hizo el PP, la de la primera mitad de los años noventa", dijo, por el tono personalizado y agresivo de las respuestas del Ejecutivo a su propuesta de aumentar las pensiones mínimas por decreto ley este mismo mes. Almunia replicó también al secretario general del PP, Javier Arenas, por haber dicho que el PSOE redujo el poder adquisitivo de las pensiones. "Demostrar lo imposible puede conducir a la desesperación".
El debate sobre la necesidad de subir las pensiones por encima del IPC centró la primera reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE tras las vacaciones estivales. Pero Almunia, en su comparecencia ante la prensa, centró la atención en el tono agresivo que ha utilizado el Gobierno del PP para desautorizar su propuesta de elevar de inmediato las ayudas más bajas, sin esperar a la reunión del Pacto de Toledo, utilizando para ello parte del billón de pesetas que Hacienda tiene previsto recaudar de más en impuestos a finales de este año. Almunia destacó particularmente la intervención del portavoz del Gobierno, Josep Piqué, el viernes pasado, quien calificó al secretario general del PSOE de "ministro del paro", de "mentir", "caer en el ridículo" y "acumular despropósitos" con sus propuestas. "El Gobierno ha perdido los nervios", respondió ayer Almunia, y recordó cómo el presidente del Ejecutivo, José María Aznar, ya advirtió antes de las vacaciones veraniegas de que dirigirían "ataques indiscriminados" contra el PSOE.
"Aznar", dijo Almunia, "se puso la venda antes de la herida" y lo anunció "ante la previsión de que el PSOE iba a crispar la vida política" por la proximidad de las elecciones legislativas. "Deben respetar las reglas del juego", enfatizó.
Preguntas parlamentarias
Tras este reproche a los modales políticos del PP, el secretario general del PSOE mantuvo su emplazamiento al Gobierno para que, independientemente de la subida de las pensiones prevista en los Presupuestos del año 2000, aumente ya mismo las ayudas mínimas por decreto ley, y anunció una interpelación y una pregunta parlamentaria sobre las pensiones en cuanto se inicie, la próxima semana, el periodo de sesiones en el Congreso. El líder socialista dedicó el grueso de su intervención de ayer a responder al Gobierno. Trató de desmontar, en primer lugar, la tesis del Ejecutivo de que su reforma fiscal ha propiciado una recaudación impositiva de un billón de pesetas por encima de lo previsto y, por tanto, la posibilidad de aumentar las pensiones mínimas. "La única reforma fiscal del Gobierno del PP ha sido la del IRPF, que ha sido el único impuesto que ha decaído, y, además, fue injusta por favorecer a los que más tenían", replicó Almunia.
En su contraataque, Almunia fue a por todas. Negó que la presión fiscal fuera mayor con los Gobiernos del PSOE que con el del PP. Señaló que en 1996, último año en que gobernó el PSOE, ya en funciones, la presión fiscal fue de un 33,7%, frente al 35,8% de 1998, en la plenitud del Ejecutivo de Aznar. "Ha aumentado dos puntos y las previsiones para 1999 son de un mayor crecimiento".
También rechazó la acusación del PP y su Gobierno de que el poder adquisitivo de las pensiones había disminuido en la etapa socialista y crecido con el Ejecutivo de Aznar. Según Almunia, el poder adquisitivo de las pensiones subió 35 puntos -3 puntos por año- en el mandato de Felipe González, de 1982 a 1996. "En los más de tres años del PP sólo ha subido un punto", añadió. Y remató: "En 1999 las pensiones están perdiendo poder adquisitivo por el aumento de los precios, y luego se les tendrá que reponer".
La acusación de que el Gobierno del PSOE traspasó al del PP, en 1996, una Seguridad Social en quiebra tuvo también la réplica de Almunia: "El sistema era perfectamente viable si se hubiesen aplicado las directrices marcadas por el Pacto de Toledo en 1995".
Aprovechó también para contraatacar al reciente anuncio de Aznar de que se dispone a crear al fin un fondo de reservas para garantizar el futuro de las pensiones, como preveía el Pacto. "Habrá que recuperar el tiempo perdido porque el fondo estaba comprometido desde 1995", dijo. Y bromeó con la afirmación de Arenas de que esta decisión de Aznar es "histórica":"La única historia son tres años de incumplimientos".
Almunia recordó que ya en el último debate de los Presupuestos, en octubre pasado, reclamó el aumento de las pensiones mínimas y, posteriormente, en el debate del Estado de la nación, en junio de 1999, pidió al Gobierno la constitución del fondo de reservas para garantizar las pensiones. Aznar, indicó Almunia, ordenó a su grupo votar en contra de ambas propuestas, en contraste con el anuncio formulado este fin de semana.
