Fernández Díaz quiere evitar la bipolarización y critica el "culto a la personalidad" de Pujol y Maragall

El presidente del Partido Popular en Cataluña y candidato a las próximas elecciones al Parlament, Alberto Fernández Díaz, anunció ayer en Tarragona que su partido afrontará estos comicios "con un debate de ideas, de programas y de propuestas, y no con un debate impulsado únicamente desde el culto a la personalidad", en referencia a sus dos principales adversarios, el nacionalista Jordi Pujol y el socialista Pasqual Maragall. Tras reunirse con la Ejecutiva del PP en Tarragona, Fernández Díaz subrayó que "apuesta por un proyecto propio, por un Partido Popular que ha sido el único que ha marcado la diferencia en estos últimos cuatro años en el Parlament en aquellas cuestiones más controvertidas, como la ley de Política Lingüística, la autodeterminación o las selecciones deportivas". Desde su punto de vista, el PP "se alza como la tercera fuerza política de Cataluña". En este sentido alertó que "en las elecciones del 17 de octubre no sólo hemos de escoger un presidente de la Generalitat, también debemos elegir el gobierno catalán". A lo que añadió: "Cataluña, afortunadamente, no es bipolar, y el PP aspira a defender una actitud y una manera de entender Cataluña diferente y alternativa a la defendida en las dos últimas décadas por CiU y PSC". Respecto al papel que en esta campaña podría tener el ministro y portavoz del Gobierno central, Josep Piqué, Fernández Díaz declaró que la participación de éste "se enmarcará dentro de la normalidad del partido y, evidentemente, desde la voluntad del PP catalán de aprovechar al máximo su figura como ministro y portavoz del Gobierno". El candidato popular lamentó que "estas elecciones catalanas hayan tenido la precampaña electoral más larga de la historia democrática española, con un Jordi Pujol que hace dos años abrió ya la caja de los truenos ante la posibilidad de anticipar las elecciones catalanas". "Esto propició", señaló el líder del PP, "que durante todo este periodo, Cataluña haya vivido instalada en una permanente electoralización y con la concatenación de campañas electorales camufladas como institucionales. Fernández Díaz citó dos: la de la fiscalidad y la que tiene como lema Catalunya, un país que creix. Para el dirigente del PP, el hecho de que Pujol haya autorizado desde el Aneto (Pirineo aragonés) el anuncio de las elecciones, "confirma su distanciamiento de la realidad". Según el presidente del PP catalán, Pujol rivaliza con el candidato a la presidencia de la Generalitat del PSC, Pasqual Maragall, "que todavía no ha bajado del Olimpo".