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Los biólogos temen que los flamencos dejen de anidar en el delta del Ebro esta temporada

Cristian Segura

La colonia de 5.000 flamencos del parque natural del delta del Ebro todavía no ha anidado este año. La Sociedad Española de Ornitología (SEO-Bird Life) y biólogos del parque creen que la construcción de un dique que atraviesa toda la Reserva Natural Parcial de La Banya, a 500 metros del lugar donde anidan los flamencos, es la causa del retraso. Los preparativos del nido y el proceso de apareamiento de los flamencos llevan más de tres meses de retraso y es casi imposible que se produzcan esta temporada, según fuentes del mismo parque.

El dique es una concesión de la dirección del parque a Infosa, empresa que explota las salinas de la zona de La Banya. El muro de contención -situado a 500 metros del lugar donde los flamencos anidan, se aparean y ponen los huevos- forma parte de los cambios que la empresa está acometiendo en sus instalaciones de desalinización del agua del delta. Las más de 2.500 parejas de flamencos del parque iniciaron durante el mes de febrero la reconstrucción de los nidos que utilizaron el año anterior, pero a finales del mismo mes los animales interrumpieron su actividad justo cuando empezaron los trabajos de construcción con maquinaria pesada del primer dique de Infosa, según fuentes del parque. El director general de SEO-Bird Life, Alejandro Sánchez, critica a la dirección del parque natural y al Departamento de Agricultura de la Generalitat por apoyar un proyecto que promueve el desarrollo industrial de las salinas en un paraje protegido como reserva natural y que es uno de los cuatro únicos puntos de Europa donde anidan regularmente los flamencos. El director de la reserva natural, Rafael Balada, ha asegurado a EL PAÍS que las irregularidades climatológicas de este invierno han sido la causa del cambio de comportamiento en las aves. Balada explica que el invierno de temperaturas suaves y el mes de febrero frío que ha habido en Europa han desorientado a los flamencos en las tres grandes colonias de flamencos del continente. Las palabras de Balada se contradicen con la situación actual de las reservas de La Camarga (Francia) y Fuente de Piedra (Andalucía). Alain Johnson, director de la Estación Biológica de la Tour du Valade y experto europeo en el estudio de los flamencos, afirma que en La Camarga no hay problemas alguno y en Fuente de Piedra sí, pero debido a la sequía que afecta un año sí y otro no a esta laguna. Johnson agrega que es habitual que una laguna presente problemas para el anidamiento porque depende del agua de la lluvia, pero no así en una salina, continuamente bañada por el agua del mar. Por otro lado, SEO-Bird Life y técnicos del parque aseguran que el clima no es la causa del problema porque se ha comprobado que el resto de especies están anidando en todo el delta sin problemas. Un cúmulo de problemas La empresa que explota las salinas tiene la autorización del parque para construir un segundo dique cuando finalice el verano, momento en el que las aves abandonan el nido. Infosa, además, está tramitando las licencias necesarias para construir más muros de contención, "los necesarios para las necesidades de la empresa", según el gerente de la firma, Juan Suquerrats. La finalidad de los diques es acelerar el proceso de cristalización del agua del mar que inunda las salinas. El cambio de sistema en la explotación de las salinas ha supuesto un aumento de la presencia humana, movimiento de tractores y tráfico de maquinaria pesada en la reserva de La Banya, situación que nunca se había dado en la zona de reproducción, según SEO. En los últimos cuatro años se ha detectado además un descenso continuado de la natalidad en la colonia de flamencos del delta. Entre 1997 y 1998 el nacimientos de polluelos descendió a la mitad. Mientras, los grupos conservacionistas creen que el cambio del nivel del agua que marca la nueva explotación de las salinas es la causa de la baja natalidad. El director del parque justifica la situación como "algo normal en un animal gregario que traslada continuamente su población" y asegura que es igual si los flamencos no crían en el delta "porque si no es aquí, ya lo harán en otras colonias".

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Sobre la firma

Cristian Segura
Escribe en EL PAÍS desde 2014. Licenciado en Periodismo y diplomado en Filosofía, ha ejercido su profesión desde 1998. Fue corresponsal del diario 'Avui' en Berlín y en Pekín. Desde 2022 cubre la guerra en Ucrania como enviado especial. Es autor de tres libros de no ficción y de dos novelas. En 2011 recibió el premio Josep Pla de narrativa.

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