Pujol garantiza al líder socialista que habrá estabilidad durante este año
El secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, escuchó ayer de labios del líder de CiU y presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, las garantías de estabilidad parlamentaria que éste dio a José María Aznar en la Moncloa el 14 de enero. "El presidente me ha confirmado", dijo, "que salvo imprevistos incidentes de recorrido que le obliguen a romper el marco de colaboración con el PP, confía en que habrá estabilidad gubernamental en 1998". Pujol también le confirmó que quiere alargar todo lo que pueda la legislatura autonómica catalana.
La de ayer fue la segunda entrevista que Almunia tuvo con Pujol desde que asumió la máxima responsabilidad en el PSOE. Duró casi dos horas y en ella pasaron revista a la situación política con especial atención a la evolución de la financiación autonómica y a la incidencia que sobre ella puede tener la reforma del IRPF.
A requerimiento de Almunia, Pujol le explicó sus previsiones de futuro sobre este asunto, para cuando en el año 2001 finalice la vigencia del sistema actual de financiación. Los nacionalistas catalanes preparan una propuesta de convenio fiscal entre la Generalitat y la Administración central que elimine o acorte las diferencias de financiación con las comunidades de régimen foral.
Almunia explicó a Pujol que el 21 de marzo el Comité Federal del PSOE aprobará su propia propuesta de financiación autonómica, "que no tiene por qué ser coincidente con la de CiU", advirtió.
