Jaime Bores presenta en TVE-1 el debate 'Digan lo que digan'

¿Es mejor llegar virgen al matrimonio? En la pareja, ¿es necesarlo funcionar bien en la cama? ¿Se fía de su marido cuando se queda de Rodríguez? Éstas son, algunas de las preguntas a las tratarán de responder los invitados al debate de TVE-1 Digan lo que digan (16.00) presentado por Jaime Bores y dirigido por Josep Ramón Lluch. Su máximo responsable desea que el espacio "se convierta en un foro donde los ciudadanos opinen líbremente".

Con el mismo título de una célebre canción del veterano Raphael, la primera cadena de TVE pone esta tarde en marcha el debate diario Digan lo que,digan. El espacio, que se emitirá en directo, utilizará la misma fórmula que siguió la temporada pasada Para entendernos, el programa que presentaba Josep Ramón LLuch y que llegó a La Primera para sustituir a Concha Galán y su i Vaya lío!

"Se ha cambiado el nombre pero no el formato", explica LIuch, que ahora ha abandonado las tareas de presentador para asumir las de director, por una cuestión de incompatibilidad laboral. "Tengo un compromiso con Canal 9, donde presento el debate Parle vosté, calle vosté los viernes por la noche. Los directivos de la televisión autonómica valenciana decidieron que podía continuar ligado a TVE, pero detrás de las cámaras", puntualiza. Según su máximo responsable 11 el programa se decantará por el diálogo, el contraste de pareceres y la discrepancia, sin emitir nunca juicios de valor".

Jaime Bores, el hombre del tiempo de Madrid directo, el informativo de Telemadrid, es el encargado de dar la cara y moderar el debate. "Mi labor consiste en poner orden y que la sangre no llegue al río. De todas formas Digan lo que digan es fundamentalmente un programa de entretenimiento, y no un lugar de reunión con ocho catedráticos discutiendo sobre la capa de ozono Esto no es La clave", afirma rotundo. Bores asegura que competir con Ana, la tertulia de

Tele 5 que capitanea con singular éxito Ana García Lozano es un aliciente añadido.

Para Josep Ramón Lluch, Digan lo que digan se centrará casi monográficamente en los asuntos de pareja. "Adaptamos los contenidos a la demanda del público. Hemos descubierto que a las personas que ven la televisión por la tarde les interesan mucho esas cuestiones", dice LLuch, quien desea que el debate se convierta en un foro donde los ciudadanos anónimos hablen libremente y sin cortapisas. "La idea es democratizar la televisión. No nos interesan las opiniones sesudas. Además, las personas con nombres y apellidos conocidos y con cargo ya aparecen continuamente en otras franjas horarias".