Ballesteros hace su mejor ronda del año en La Moraleja

Fue el día en que un par de ellos empezaron a sacar la cabeza del hoyo. Fue, ayer, el día en que Severiano Ballesteros sonrió por primera vez en el año. Fue la primera jornada del Open de España de golf en La Moraleja. Del campo madrileño salió líder el fenómeno del 95 Aleksander Cejka, un joven alemán de origen checo que hace dos años, a los 24, sorprendió al circuito europeo con tres victorias para luego hundirse en una sequía absoluta. Con los mismos golpes le acompaña en primera posición el ganador en 1996, el irlandés Padraig Harrington. Pero el protagonista del día fue Ballesteros. Terminó la jornada a cuatro golpes del liderato, pero su juego valió más que los 70 golpes que tuvo que firmar. Aun así no deja de ser su mejor ronda del año.Fue el viejo estilo Ballesteros, el que llevó al cántabro a revolucionar el golf mundial en los años 70 y a ganar 72 torneos, incluidos cinco grandes en su carrera. En un partido exagerado logró seis birdies e incluso tuvo oportunidad de algún eagle, pero también visitó el agua en el hoyo 6 y cometió dos bogeys consecutivos en el 13 y en el 14. "Eso fue porque es muy difícil mantener la concentración durante más de cuatro horas", dijo un Ballesteros tan alegre que incluso pronosticó que seguiría venciendo en la próxima década. "Éste es un juego de pasión y yo la tengo. ¿Por qué debería retirarme a los 40 años? Tengo la impresión de que hay gente que quiere que lo deje, pero yo no. Ha sido duro y me ha dolido jugar tan mal, pero aún puedo ser un ganador. He ganado torneos en los 70, en los 80 y en los 90. Y puedo seguir haciéndolo en los 2000".

Cejka y Ballesteros, aparte de salir de momentos difíciles, comparten una inspiración, la del estadounidense Tiger Woods. El alemán, que se cortará literalmente la coleta si gana en Madrid, ha acortado su backswing, al estilo de Woods. Y el cántabro está trabajando su swing con Butch Harmon, el profesor del prodigio de Augusta.

Greg Norman se recuperó tanto de la tarde-noche anterior de "hospitalidad española", como de un bogey en el hoyo l2º para terminar con - 3. José María Olazábal falló con el driver, pero, curiosamente, acertó con el putter -su palo malo en Augusta- y también terminó con - 3. Incluso Miguel Ángel Jiménez, sólo en su cuarto torneo de la temporada, dejó de hacer el "gandul" y firmó -4.