_
_
_
_

Los padres de la niña drogada no pudieron verla tras quedar en libertad

Los padres de la bebé de tres meses ingresada el pasado martes en el hospital infantil Gregorio Marañón, intoxicada con drogas duras (heroína y cocaína), intentaron verla, sin conseguirlo, en la madrugada de ayer, tras quedar en libertad.Los padres, de 18 y 17 años, fueron detenidos al comunicar los facultativos del centro a la policía el motivo del ingreso de la niña. La titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Madrid, Rosario Espinosa, puso en libertad, alrededor de la una de la madrugada de ayer, tanto a los padres como a un tío de la pequeña. Tras abandonar las dependencias judiciales, éstos se dirigieron inmediatamente al centro sanitario. Sin embargo, trabajadores del hospital les indicaron que no podían ver a su hija.

La niña, que permaneció en la unidad de cuidados intensivos dos días, puede ser dada de alta mañana, lunes.

La policía asegura que un testigo ha indicado que compró droga en la chabola de los padres de la pequeña el mismo día que resultó intoxicada. La madre, E. P. M., insiste en que utilizó, sin saberlo, un bote con droga para preparar el biberón de su hija. Ambos progenitores estaban ayer con los abuelos maternos, que han pedido la tutela de la criatura.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_