El Gobierno francés opta por el grupo Lagardere para la venta de Thomson
El Gobierno francés manifestó ayer su deseo de que sea el grupo privado Lagardere el que adquiera la empresa pública Thomson, especializada en electrónica y con una importante división militar. El comunicado ministerial expresa su "preferencia después de haber estudiado las dos ofertas existentes" -la otra era la presentada por Alcatel- y hace que la decisión definitiva ya sólo dependa de "las conclusiones de la Comisión de Privatización, que se definirá una vez se haya pronunciado la comisión europea". El montante total de la operación aún no se ha dado a conocer.Para hacer factible su privatización, el grupo Thomson ha sido dividido según sus especialidades. Así, el sector multimedia, de electrónica del hogar, ha sido adquirido por los surcoreanos de Daewoo Electronics, pero el de electrónica militar y civil no podía escapar del control nacional y de ahí las ofertas de Lagardere y Alcatel.
El Gobierno, que inscribe la operación dentro de un programa mucho más vasto de reestructuración de la industria bélica, está dispuesto a recapitalizar Thomson inyectando 11.000 millones de francos (unos 270.000 millones de pesetas). Según el primer ministro Alain Juppé,esto es necesario debido a que la empresa "nunca fue recapitalizada de manera suficiente desde su nacionalización en el año 1982 y ha tenido que sobrevivir arrastrando un endeudamiento excesivo".
Para la DGA (Delegación General de Armamento) el objetivo es crear "un polo electrónico que agrupe las competencias y conocimientos que hacen de Francia el número dos mundial en materia de electrónica de Defensa". La DGA, en sus planes, ya había precisado que "la privatización de Thomson será el factor clave de una reorganización de gran amplitud en el sector de la electrónica".
El grupo Lagardere, que controla Matra, participa pues de la misma estrategia de fusión que se ha impuesto para Aerospatiale y Dassault, también un encuentro entre una descapitalizada pero muy competitiva sociedad pública y una pequeña pero muy rentable empresa privada. Matra fabrica misiles, satélites y participa en la aventura de la lanzadera espacial Ariane. El Gobierno respalda la estrategia de la DGA y cree que el encuentro entre Thomson y Matra permitirá "crear un grupo que figurará entre los primeros del mundo" que será "capaz de proporcionar sistemas de defensa completos dispuestos para ser utilizados".
