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Tribuna
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Lo primero, no perder

Madrid-Milán. Muy pocas expectativas creó el Madrid en el primer tiempo. Sanchis-Desailly y Milla-Albertini no fueron, capaces ni de supera la presión del Deportivo, ni de frenar su calidad en la zona ancha. Demasiado impotente.Diez contra diez. El partido tomó cuando el cansancio no permitió ejercer la presión de la primera parte. El Madrid mejoró en la medida en que el Depor le dio más espacio y tiempo. A ello contribuyó la expulsión de los dos jugadores.

'El Depor'. Toshack ha confeccionado un equipo que parece muy sólido. La legión francesa rendirá buenos frutos. Gran concentración y mucha capacidad para recuperar posiciones defensivas, y, sobre todo, calidad, sorpresa e imaginación en algunos, hombres. Con el cansancio bajó.

Rivaldo. Qué calidad la de este jugador. Completísimo. Se prodigó en todas las fases del juego. Remató desde todas las posturas, incluida, una en plancha que estuvo a punto de ser gol. Defendió y casi siempre estuvo desmarcado. Y eso, contra un equipo de Capello.

Capello. Muchas quejas antes del partido, que no solamente llevaron la desconfianza a su afición, sino que parecieron alcanzar a los jugadores, que no estuvieron a su altura. Muchas justificaciones. Muy gesticulante ante la impotencia de su equipo, que jugó mejor con el cansancio.

Sanchis y Hierro. Sorpresa en el intercambio de posiciones de estos dos jugadores. Parece más adaptado a jugar por delante de la defensa Hierro, que además tiene más llegada al área contraria. Seedorf y Redondo mejorarán seguramente algunas de las carencias en esa zona.

El ordenador. Habrá que estar preparado para lo que decida el ordenador en cuanto a las designaciones. Puede pasar de todo. En este caso, Daudén Ibáñez fue, bastante severo con, las tarjetas. Hubo un posible penalti a Mijatovic.

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