El 'Frente Populista' toma posiciones
Ya hay quien le llama el Ideólogo. Francisco Mora, presidente del Racing de Santander, tuvo la ocurrencia el pasado 16 de agosto de ofrecerle a la Liga una solución a la guerra del fútbol: la de que hubiera 22 equipos en Primera División los dos próximos años. La propuesta, entonces, no necesitó ni votación. La aclamación pudo con todo.Ayer, en la sede de la federación, Francisco Mora acabó convirtiéndose en protagonista estelar. Él no buscó a nadie, pero a él le buscaron todos. Y el primero, Gerardo González, secretario general de la Federación, que ni siquiera intentó encontrar algún desierto despacho donde reunirse con él. Lo hizo en la misma sala donde estaban presentes los periodistas.
Las declaraciones posteriores de Francisco Mora demostraron que el negociador federativo no consiguió su propósito. El presidente racinguista lo tenía tanto o más claro que antes. Y así lo puso de manifiesto: "Modificar la solución tomada por la Liga es como meternos un torpedo en la cocina. El fútbol español no son sólo Madrid y Barcelona, como algunos piensan. En mi nombre y en el de mi club sólo puedo decir que el Racing se opone de modo tajante a que la federación rectifique la decisión tomada por la Liga, lo que significaría que cuatro equipos bajarían de Primera a Segunda directamente".
Mora, el representante
El llamado Frente Populista, formado por los equipos más modestos de Primera y casi todos los de Segunda, encontró ayer en el presidente racinguista a su mejor representante. No quieren que la Federación rectifique absolutamente nada: "Se ha sublevado a la afición de dos equipos como Sevilla y Celta", dijo Mora, "para justificar la actuación de ciertos personajes. Y cuando por fin encontramos una solución lógica, la de una Liga de 22 durante dos años, se monta otra historia y, lo que es peor, se califica a la resolución de disparate".El mandatario santanderino finalizó su improvisada rueda de prensa con un mensaje claro: "Se está tratando de limitar un derecho legítimo de muchas ciudades españolas, como es el que sus equipos aspiren a estar en Segunda o en Primera. Y eso es muy peligroso, como ya se ha visto".
Los aliados de Francisco Mora no tardaron en dejarse ver. Uno de los más explícitos fue Emiliano Carballo, presidente del Toledo, que no dudó en situar a la Federación en el que el considera su sitio: "Bien claro dijo el CSD que la decisión era de la Liga", declaró. "Pues ya está. La federación puede instar, que es lo que yo creo que ha hecho, pero no exigir".
El presidente toledano demostró tener muy claro que la solución definitiva no pasa por la convocatoria de otra asamblea de la Liga, "que va a decir lo mismo que la del miércoles pasado. Es una locura que intenten quitarnos a los equipos de Segunda División los dos partidos de promoción. Es una verdadera locura", declaró.
