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Antonio Puig entra en el capital de Perfumería Gal desbancando a Palmolive

La empresa Antonio Puig y el grupo familiar Sainz de Vicuña han establecido una alianza para controlar el 75% de la empresa Perfumería Gal. La operación, culminada ayer mismo, refuerza el liderato del grupo Puig en el mercado nacional de cosmética y perfumería después de una dura pugna para el control de Gal con la multinacional Colgate Palmolive.

El grupo patrimonial de Antonio Puig, SA, liderado por los hermanos Enrique Puig, presidente de la empresa,- y Mariano Puig, consejero delegado y presidente del Instituto de la Empresa Familiar, cerró ayer un acuerdo con la familia Sainz de Vicuña cuya formalización establece una nueva mayoría en Gal.Antonio Puig, que tiene filiales en los mercados de Europa, Estados Unidos y Asia y una plantilla de 2.800 empleados, ha invertido 2.000 millones de pesetas en la operación. Ambos grupos familiares pasan a controlar el 75% de Perfumería Gal a través de la sociedad Veritas, SL, una instrumental creada especialmente para articular el nuevo núcleo duro accionarial en la empresa de perfumería.

Los Puig, con un 35%, y los Sainz de Vicuña, con un 40%, se convierten así en los principales accionistas de Gal. Por su parte, la multinacional norteamericana Colgate Palmolive sigue con un 15% del capital de Gal, una participación que fue adquirida con la compra de pequeños paquetes en Bolsa entre 1990 y 1991, antes de que la empresa de perfumería se autoexcluyera del mercado de valores a través de una OPA.

En las últimas décadas, el presidente de Gal, José Manuel Sainz de Vicuña -hermano de José María, ex consejero de Banesto y ex presidente de Garriga y Nogués, la extinta filial catalana del mismo banco-, ha mantenido el control sobre la mayor participación en el capital de la empresa a través de la sociedad de cartera Sibec. La entrada de Fluig resume la vocación de que el control esté en manos españolas.

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