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Estudiantes de Alcalá evalúan al profesorado

Un equipo de estudiantes de la Politécnica ha creado un sistema para evaluar a sus profesores, al que denominan DSD (Dispositivo de Seguimiento de la Docencia). Su intención es contribuir a mejorar la calidad de la enseñanza en su escuela, donde 2.200 alumnos estudian informática, ingeniería industrial y telecomunicaciones.

En el diseño del DSD han trabajado 15 miembros de la delegación de alumnos convencidos de que un sistema que partiese de ellos sería más eficaz que las encuestas que anualmente realiza la Universidad para evaluar la calidad de la docencia. "Éstas tienen pocas variables y las preguntas las hacen ellos. Nosotros resaltamos los aspectos que como estudiantes creemos más interesantes", explica José Carlos Fernández, uno de los inventores del dispositivo.

Fernández insiste en que el objetivo no es hacer una clasificación, ni siquiera obtener una visión global del nivel del profesorado, sino, únicamente, mejorar la calidad de la docencia. Para explicárselo a los profesores se pusieron en contacto, antes de empezar, con los directores de departamento, dejando claro que pretendía que el DSD significase una colaboración entre ambos.

El dispositivo se ha puesto en marcha este cuatrimestre. Los profesores lo saben, aunque se les oculta quiénes son los alumnos encargados de la evaluación. Esta es literaria, cada uno hace las consideraciones que estima oportunas, sin puntuaciones numéricas. Eso sí, todos trabajan sobre un guión elaborado desde la delegación a partir de los estatutos de la Universidad de Alcalá. "Simplemente hemos visto los deberes de los profesores y los derechos de los alumnos, y vamos a comprobar si se cumplen", explica, Fernández.

Inspectores

Los inspectores estudiantiles tendrán que evaluar si el profesor imparte el programa de la asignatura, su conducta habitual en el aula, su disponibilidad, si cumple los horarios, si ha comunicado a principios de curso la bibliografía y los contenidos de la asignatura,y si se ha preocupado de que estén disponibles los medios necesarios para realizar las prácticas obligatorias. También tendrán en cuenta que los apuntes que se les den por escrito estén bien redactados y los porcentajes de aprobados y suspensos. Las notas de los profesores no se les entregarán a ellos personalmente. Los estudiantes han considerado más eficaz enviar directamente los informes al director de cada departamento, sus jefes más inmediatos, al final de cada cuatrimestre. Sólo en el caso de flagrante incapacidad, los alumnos se reservan el derecho de mandar el estudio al vicerrectorado de Docencia. Algo que no creen que llegue a producirse en su escuela.

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