Aznar pide a los catalanes que sacrifiquen el "voto irrelevante" para que el PP pueda lograr el cambio
El candidato del Partido Popular, José María Aznar, inició ayer en Barcelona el último tramo de la campaña electoral apelando al voto útil. Para ello se enfrentó directamente a CiU y otras formaciones, a las que consideró irrelevantes a la hora de conseguir el relevo el Gobierno socialista. Cerca de 15.000 personas le ofrecieron en la plaza de toros Monumental la acogida más calurosa que ha recibido hasta ahora. Tras el mitin, Aznar se declaró satisfecho por el segundo debate televisivo -dijo que hubo "un empate" y situó el resultado global en punto y medio a su favor y medio punto para Felipe González- y calificó al candidato socialista de chiflado cuando afirma que los populares van a suprimir la cobertura social de los desempleados.
El presidente del PP se emocionó poco antes de terminar su discurso en la plaza de toros cuando el público, que le aclamó como presidente y torero, coreó el oé, oé de los grandes partidos del Barça y encendió centenares de bengalas. Aznar acabó cogiendo también un par de luminarias y proclamó: "Todas esas luces son luces de esperanza. No hay quién pare el cambio en España, no hay quién lo pare".En función del objetivo de cambiar el Gobierno, pidió a los electores que reflexionen porque a lo mejor un voto a otra formación política es irrelevante, y si se le da al Partido Popular sirve para conseguir el cambio". Más concreto aún, hablando desde Cataluña, Aznar subrayó que el 6 de junio "no se discute un grado más o menos de catalanismo, sino si gobierna el PSOE o el PP, y los catalanes que quieran el cambio tienen la oportunidad de decidir".
Ante un público entregado como nunca, con banderas españolas y, catalanas, el líder de los populares se declaró dispuesto a desarrollar las competencias estatutarias, pero también, armónicamente, las constitucionales; se comprometió a poner en marcha mecanismos de corresponsabilidad fiscal, (sin concretar la fórmula ni aludir al 15% del IRPF) y cosechó una ovación de gala al defender "el bilinguismo real en libertad, sin imposiciones para nadie".
La resaca del segundo debate ante las cámaras de televisión estuvo presente en su discurso y dio lugar a alguna queja entre el público por su falta de contundencia ante González. Aznar argumentó que los populares "no inventan programas que no existen" para desacreditar a sus adversarios, "ni levantan calumnias a los demás". "Yo no me invento programas para meter miedo a los pensionistas", insistió en otro momento. "¿Pero qué tienen que ocultar para tener tanto miedo".
"Eso, anoche"
Sobre la estabilidad del Gobierno, el líder del PP aseguró que su formación política la asegura mejor que ninguna otra, porque está unida y cohesionada. "El que quiera votar a los de Filesa", dijo, "lo tiene fácil: que les vote". Terminada la ovación, una voz femenina se quejó a gritos desde el tendido: "Eso, anoche".
Aznar comentó luego con los periodistas el último debate con González. Se declaró satisfecho, negó con rotundidad un pacto previo para excluir la corrupción de los temas a abordar y enumeró de corrido 12 propuestas concretas que hizo durante la discusión como respuesta a las críticas sobre la falta de compromisos concretos. Según el presidente del Partido Popular, incluso cuando esté gobernando habrá quien se queje de la falta de propuestas. A modo de resumen, el candidato consideró que ni tras el primer debate hubo motivo para la sorpresa que manifestó mucha gente, ni tras el segundo ay motivo para lo contrario.
En una entrevista emitida noche por TVE, el líder del PP aseguró que, si llega al Gobierno, creará en el Congreso de los Diputados una comisión para controlar las contrataciones públicas. Al frente de esta comisión estará, dijo, un miembro de la oposición.
