_
_
_
_
_
GENTE

Sergio Ramírez

Publica en España 'La marca del zorro'

Rocío García

Sergio Ramírez prefiere sin ninguna duda su faceta de escritor a la de político. Él se siente fundamentalmente escritor, aunque reconoce que la gran satisfacción de su vida ha sido la de trabajar por la transformación de su país. Vicepresidente del Gobierno nicaragüense, hasta la derrota del Frente Sandinista en las urnas el pasado 25 de febrero, Sergio Ramírez, en sus 47 años, ha compatibilizado la política y la literatura. "Yo he sido escritor en una guerra", dijo Sergio Ramírez a este periódico durante su visita a Madrid esta semana.Acaba de publicar en España un nuevo libro, La marca del zorro, un relato basado en el testimonio de Francisco Rivera, alias El Zorro, dirigente de la lucha militar contra el dictador Somoza en la ciudad de Estelí. Francisco Rivera, actual diputado del Frente Sandinista, logró en julio de 1979, tras dos intentonas fallidas, tomar el cuartel de la Guardia Nacional en esa ciudad al frente de 3.000 hombres. Ramírez grabó en vídeo una conversación de 17 horas con Rivera, a partir de la cual escribió el relato. "Rivera encarnaba la vida de muchos jóvenes de aquel tiempo. Pasó años en la montaña, en la más completa soledad. Después de que su compañera Claudia Chamorro [una familiar de la actual presidenta Violeta Chamorro] muriera en un combate cubriéndole la retaguardia, El Zorro pasó meses perdido en la montaña". El ex vicepresidente nicaragüense ha sentido pasión desde siempre por esta historia. No sólo desde un punto de vista frío y estratégico, de como un joven de familia humilde con sólo 17 años y el dinero del pasaje desde Managua hasta Estelí organiza un levantamiento militar, con toda la red de colaboradores clandestinos, correos, armas..., sino también de las vivencias personales de El Zorro, sus dudas, miedos y soledades.

Ha conocido el sabor del fracaso hace muy poco y reconoce que emocionalmente la derrota del Frente Sandinista en las pasadas elecciones fue un golpe difícil. "Se te viene el mundo encima. Sin embargo, es sólo una impresión del primer momento", dice este hombre grande y sereno, que tuvo el pasado febrero la ocasión ideal para abandonar la política, idea que le ronda desde hace años. "Siempre lo he pensado, pero no he podido. No depende de mí. Después de la derrota lo pensé, pero ahí están los problemas, y yo estoy metido en esa circunstancia política".

Actual jefe de la oposición parlamentaria, es optimista ante el futuro de su país. "Todos los fallos que tuvo el Frente Sandinista fueron causados por la guerra. Luchábamos en desventaja. Yo no sé lo que es gobernar en paz y dedicarse al desarrollo de un país. Mi experiencia fue la de defender un país y mantenerlo a flote". Experiencia que no duda en poder llevaría a cabo algún día. "Ése es el reto actual del sandinismo: gobernar Nicaragua en paz".

Y es sobre Nicaragua sobre la que planea siempre su literatura. Su próxima novela, sobre la que ya está trabajando, tratará de la conspiración de cuatro muchachos inexpertos para asesinar en 1956, en la ciudad de León, a Anastasio Somoza García, el creador de la dinastía Somoza. "Era una locura, no tenían ninguna posibilidad de éxito. A mí me interesa el tono casi festivo en el que realizaron el atentado al hombre más protegido de Nicaragua, durante un baile, con un alarde de despreocupación total y sin contar con las ayudas que les habían prometido".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_