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Unos 20.000 turistas británicos, afectados por la huelga de controladores aéreos de Barcelona

Más de 20.000 turistas británicos han resultado perjudicados por la huelga de los controladores aéreo-s del aeropuerto de El Prat de Llobregat, en Barcelona. Unos 10.000 turistas sufrieron importantes retrasos en el aeropuerto londinense de Gatwitck. El paro ha afectado también a unos 8.000 viajeros en Manchester y a unos 3.000 en Birmingham. Miles de turistas extranjeros se aglomeraban ayer en el aeropuerto de Son Sant Joan, en Palma de Mallorca, cuyo espacio aéreo se controla desde Barcelona, donde los vuelos sufrieron retrasos de hasta seis horas. Entre 60 y 70 aviones se encontraban retenidos ayer tarde en diversos aeropuertos europeos como consecuencia de esta huelga, según la Dirección General de Aviación Civil.

La situación fue especialmente grave en el aeropuerto de Gatwick, que vive el fin de semana de mayor tráfico de todo el año, donde tuvieron que ser habilitadas dos carpas en el interior del edificio para alojar a las 10.000 personas que resultaron afectadas por la huelga de controladores de El Prat. En estas carpas, copañías de teatro, magos y payasos tuvieron que actuar para entretener a los niños.Tanto en los aeropuertos británicos como en el de Palma de Mallorca, los vuelos con mayores retrasos fueron los charters, cuyos destinos finales son la Costa Brava y las Baleares.

Vemon Murphy, director comercial adjunto del aeropuerto di Gatwick, pidió a los turistas británicos que boicoteen los viajes a España. Murphy acusó a los controladores aéreos españoles de "estar poniendo un cuchillo en las gargantas de los veraneantes británicos; esto es una desgracia". El directivo añadió que la huelga supone "una explotación de los turistas, que sólo disponen de un par de semanas de asueto, pero la respuesta está en manos de los británicos". Según Murphy, "los turistas pueden pensar que si los españoles quieren hacernos esto, ¿por qué vamos a querer volver allí de vacaciones el año próximo?.Como consecuencia de la huelga, en el aeropuerto de El Prat de Barcelona se cancelaron algunos vuelos y se modificó el horario de otros, según informa Jordi Oliveres. Además, diversos vuelos tuvieron retrasos. La compañía Iberia informó que sólo fueron de 45 minutos a dos horas, mientras que los controladores manifestaron que los retrasos habían sido de media hora a cinco horas. Los aeropuertos afectados, mucho más que el de Barcelona, según los controladores, fueron los de Palma de Mallorca y Alicante, bajo el control del espacio aéreo de El Prat.

Nuevas jornadas de paro

Todos los vuelos charter salieron de los aeropuertos pero algunos de ellos con grandes retrasos, lo que dio lugar a que algunos vuelos programados para ayer sábado tuvieran su salida o entrada a primeras horas de hoy domingo. Según los controladores, la Administración no ha dado ningún paso para negociar, y si todo continúa igual que hasta el día de ayer, el centro de control aéreo de Barcelona volvería a realizar sendos paros de 24 horas el 29 de agosto y el 5 de septiembre.

La Dirección General de Aviación Civil ha prohibido, mediante una circular, que los controladores realicen declaraciones dentro del recinto del aeropuerto. El comité de huelga convocó una conferencia de prensa en las instalaciones de la Renfe en el aeropuerto de Barcelona, en la que los controladores se reafirmaron en su posición de fuerza ante la Administración. Añadieron que no entendían la cantidad de servicios mínimos impuestos, que afectan a un 86% de la plantilla de Barcelona, ni la reducción de la operatividad del aeropuerto en un 40%.

El espacio aéreo que controla el centro de Barcelona afecta a aeropuertos tan importantes en esta época del año como los de Alicante y Palma de Mallorca, lugares donde más se notó el paro de Barcelona, según el comité de huelga. Otros aeropuertos afectados fueron los de Ibiza, Valencia y Reus. En este último la compañía Britania canceló, ayer todos sus vuelos.

La huelga de los controladores aéreos de El Prat de Barcelona se debe a la exigencia de que se les reconozca la gratificación de 10.000 pesetas mensuales que por servicios especiales venían recibiendo hasta 1979.

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