El efecto de la pantalla
La delegación barcelonesa guarda celosamente el sepreto de su golpe de efecto para la intervención ante los miembros del COI. Después del discurso de Pasqual Maragall, y antes de someterse a las preguntas del COI, la delegación catalana proyectará una película, realizada por Leopoldo Pomés. Todos hablan de ella, pero nadie quiere desvelar su contenido, destinado fundamentalmente a convencer al gran senado de la voluntad olímpica de Barcelona.La película, en cinemascope, tiene una duración de 12 minutos y 40 segundos. Ésta será la primera ocasión en la que una delegación promociona su candidatura con imágenes proyectadas en la gran pantalla. En la última gran reunión del COI, en Baden-Baden, Seúl sorprendió añadiendo al discurso de su alcaide unas imágenes de vídeo.
En la película de Pomés, el alcalde de Barcelona aparece haciendo footing en Montjuïc con un grupo de niños. Algunos de esos niños son el hilo conductor del filme, que discurre por los puntos neurálgicos de la ciudad. Según una de las pocas personas que han podido ver la película, "pone la piel de gallina".