_
_
_
_
_

Auita recorre un amargo camino para copar récords mundiales

JUAN MORA, Said Auita está viviendo una de sus temporadas más amargas. Es tan bueno que sólo puede ganarse a sí mismo. Los británicos le rehúyen y los demás no pueden seguirle. Su único rival es él mismo. Cuando toma la salida fija la vista en la meta, mira el, cronómetro y, sabe que tiene que llegar allí antes que días, meses o años atrás lo hiciera el hombre más rápido del mundo, que en ocasiones ha sido el propio Auita. Esta temporada se ha quedado ya por tres veces a menos dos segundo de los récords mundiales. Tiene dos y quiere otros, tantos.

Hay que remontarse a la época del keniata Henry Rono, en los años setenta, para encontrar un atleta tan completo como el marroquí Said Auita. Rono tuvo una historia extraña. Ese hombre prácticamente desconocido, que pasaba inadvertido en cuantas grandes competiciones intervenía, se convirtió en cuádruple plusmarquista mundial: 3.000 metros lisos (7.32.1 minutos), 3.000 obstáculos (8.05.4), 5.000 (13.06.20) y 10.000 (27.22.4). Desapareció tan pronto como resurgió. Ahora sólo le quedan los dos primeros, y uno de ellos, el de 3.000 metros lisos; es uno de los más codiciados por su sucesor, Said Auita, que se ha formado deportivamente en Italia.Auita anunció la temporada pasada que deseaba superar a Rono. Terminó el año a mitad de camino, con dos récords mundiales, los de 1.500 metros (3.29.45 minutos) y 5.000 (13.00.40). Este verano todo sigue igual porque en sus intentos de mejora se quedó a 46 centésimas de su propio récord de 5.000 en La Coruña y a44, primero, del de 3.000 en Zúrich y luego, el pasado domingo, en Colonia, a 13. Es un récord que ya se le resiste desde el año pasado, cuando en Bruselas se quedó a 84 centésimas.

La ambición que mantiene a Auita en el atletismo, una vez que se ha quedado sin rivales, no es una quimera. La posibilidad de que llegue a tener seisSus marcas

Ya tiene dos, 1.500 y 5.000, pero es que en cuatro pruebas más está entre los mejores atletas de todos los tiempos: segundo en la milla (1.609 metros) con 3.46.92 minutos, a 61 centésimas del récord del británico Steve Cram; segundo en los 3.000 metros, con 7.32.23 minutos, a 13 centésimas del récord de Rono; cuarto en los 2.000 metros, con 4.54.02, a 2.23 segundos del récord del mismo Cram, y sexto en los 10.000 metr9s, con 27.26.11 minutos, a 12.30 segundos del récord del portugués Fernando Mamede en su primera experiencia sobre esta distancia.

Con tal historial, Auita se ha convertido en el mejor atleta de estos tiempos. Sólo hay un hombre de su generación, Cram, que ha demostrado ser más rápido que él en la milla y los 2.000 metros. Los demás que le preceden en las mejores marcas de otras pruebas ya han desaparecido o se encuentran en el ocaso de su carrera: Walker (Nueva Zelanda) y Wessinghage (RFA) en 2.000 metros, y los portugueses Mamede y Carlos Lopes, Rono, Schildatier (RDA) y Salazar (EE UU) en 10.000. Auita sabía lo que se decía cuando anunció su objetivo.

Pero fue tan ambicioso en sus deseos que esta temporada se le acumulan los fracasos, si como tales se pueden considerar el no mejorar los récords mundiales, algo que los otros ni siquiera intentan.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_