Hispanoil y Campsa adquirirán reservas fuera de España
Hispanoil y Campsa se encuentran estudiando la posibilidad de adquirir importantes reservas probadas de petróleo fuera de España dentro de una estrategia que persigue garantizar, a medio plazo, un mejor aprovisionamiento de crudo a las refinerías españolas. La caída de los precios en los mercados internacionales está acelerando este proceso en un momento que muchas compañías internacionales de exploración tienen que recurrir a vender sus reservas para poder hacer frente a los problemas financieros originados por los bajos precios.
El consejo de administración de Campsa, en el que están representadas las refinerías públicas y privadas, ha analizado esta eventualidad y dado instrucciones a su dirección para que proceda al estudio de las ofertas que existen en el mercado. La idea de Campsa es dedicar a este fin el 15% de sus beneficios anuales tal como quedó establecido en los compromisos de creación de la nueva Campsa.La sociedad tiene previsto solicitar en breve las autorizaciones pertinentes para destinar a la adquisición de reservas, no sólo la parte correspondiente del ejercicio pasado sino la de los próximos tres o cuatro años. La lógica de esta estrategia se deriva del hecho de que con el 15% de los beneficios de un sólo año de la compañía -unos 2.000 millones de pesetas- apenas se puede salir al mercado. No sucede lo mismo con la acumulación de las cantidades de varios años, que permiten incrementar. la escala de compras.
Hispanoil también ha introducido recientemente cambios sustanciales en su política de exploración y prospección como consecuencia de la baja de los precios del crudo. En una primera fase, la empresa pública, englobada en el Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH), tiene previsto hacer mayor hincapié en la exploración externa que en la interna, mucho más arriesgada y que ofrece resultados menos satisfactorios. Aparte de resultar cara y arriesgada, la exploración en España tiene ya escaso margen de maniobra debido al elevado número de zonas "tocadas" en épocas anteriores.
Giro estratégico
Hispanoil ha dado, en este sentido, un giro estratégico en sus prioridades y, además, ha cambiado los objetivos de invertir en exploración por el de comprar reservas a, bajo precio. De esta manera se elimina el riesgo de resultados negativos y se adquieren reservas probadas que son puestas en venta, a bajo precio, por las compañías que en el pasado arriesgaron su dinero en esta función. Ambas compañías están estudiando varias ofertas, tanto en Estados Unidos como en el mar del Norte, si bien aún no se tienen noticias de que se haya cerrado ninguna operación. Se ha mantenido contactos, sin embargo, con empresas norteamericanas y británicas, si bien el mayor esfuerzo se está realizando en determinados países latinoamericanos.El problema de esta nueva estrategia de las empresas españolas -también se ha sumado Ciepsa, filial de exploración de Cepsa- es que está apareciendo mucha competencia en el mercado. Los japoneses, por ejemplo, se han adelantado y han materializado ya importantes acuerdos con Texaco, en Estados Unidos y con Britoil, en el mar del Norte, que vendió a Sumitomo Petroleum Development reservas por importe de 17,9 millones de dólares.
