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Detenidas 13 personas en Gijón por tráfico ilegal de armas

Trece vecinos de Gijón han sido detenidos por la policía y puestos a disposición judicial por presunto tráfico ¡legal de armas adquiridas en el Principado de Andorra. Cuatro de ellos continuaban ayer en la prisión de El Coto, en Gijón, y las otras nueve quedaron en libertad tras prestar declaración ante el juez. La policía les incautó un total de 11 revólveres de fabricación alemana, una pistola y numerosa munición.Según versiones policiales, el principal encausado en este tráfico ilegal de armas es José Ángel Moro Magdalena, de 38 años, metalúrgico de la factoría de Ensidesa en Veriña (Gijón). Fuentes próximas al grupo de atracos de la brigada de la policía judicial de Gijón indicaron que José Ángel Moro viajaba desde hace tres años a Andorra para adquirir material diverso y armas de fuego, que pasaba ilegalmente a España.

Otra de sus fuentes de suministro, según se desprende de las investigaciones realizadas hasta ahora, era el dueño del restaurante leridano Lo-Plat, Roberto Rispa, quien, al parecer, adquiría revólveres y pistolas en la Armería Andorra y los enviaba posteriormente a Gijón a través de agencias de transportes. José Ángel Moro declaró ante el juez que no conocía personalmente a su contacto en Lérida, con quien dijo que sólo había hablado por teléfono. No obstante, aseguró también que Roberto Rispa le había ofrecido la posibilidad de utilizar un helicóptero para pasar las armas directamente de Andorra a España.

La operación policial, que ha culminado por ahora con estas detenciones, se inició tras la delación de uno de los presuntos implicados en la adquisición ilegal de este armamento procedente de Andorra. Se trata de un jubilado de Ensidesa, Dalmacio Duarte García, de 43 años, quien, tras seguir el consejo de un conocido suyo, funcionario de prisiones, entregó voluntariamente a la policía tres revólveres y diversa munición que le había suministrado José Angel Moro. Siguiendo esta pista, la policía gijonesa detuvo a otras 12 personas, implicadas en distinto grado en la compra y distribución de las armas que recibía José Ángel Moro desde Andorra. Todos ellos aseguraron en sus declaraciones ante el juez que habían adquirido las armas para su seguridad personal y que nunca las habían utilizado.

Gran parte de las armas requisadas por la policía son revólveres de gas que posteriormente habían sido manipulados en el cañón para que pudieran disparar proyectiles del calibre 22. Entre el material incautado hasta ahora por la policía (ayer se rumoreaba la aparición de otras tres pistolas) figuran nueve revólveres de gas marca Reck-2200, un revólver marca Reck-Cobra, un revólver marca Derringen, una pistola de gas marca Rehoner-Sport, 117 cartuchos del calibre 22 y 25 cartuchos de gas. Las 13 personas detenidas por la policía, además de los citados José Ángel Moro y Dalmacio Duarte, son Roberto González Braña, metalúrgico; José Manuel García Suárez, mecánico; Enrique Álvarez Álvarez, electricista; David Rodríguez Fernández, albañil, Tomás Fernández Muñiz, conductor; Laudino Velasco García, soldador; Constantino Granda Díaz, industrial; Manuel Toraño Cueto, industrial; Manuel Ángel González Rodríguez, representante; Francisco Blasón, sastre, y José Manuel Nieda, peón de albañil.

En la prisión de El Coto, de donde podrían salir hoy en libertad bajo fianza, continuaban internados ayer José Ángel Moro, Roberto González, José Manuel García y Enrique Álvarez.

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