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CANARIAS

La dueña y un empleado de una tienda de comestibles ganaron los 60 millones de la ONCE

Juana Artiles Romero, persona muy popular en la pequeña Villa de Agüimes (localidad situada a unos 30 kilómetros de Las Palmas, al sur de Gran Canaria) y el empleado de su tienda de comestibles José Santana Méndez, ambos solteros, son las dos personas que se reparten los 60 millones del premio especial de la Organización Nacional de Ciegos. Además, les ha tocado el millón normal del boleto BE del número 73.938.

La villa de Agüimes, famosa en todo el archipiélago por sus tradicionales carnavales, era ayer una fiesta y, como afirmó un vecino, "este año se ha adelantado la alegría del carnaval gracias a estos 60 millones que se han ganado dos hijos del pueblo". Nada más conocerse la identidad de los agraciados, en la mañana de ayer, la casi totalidad de los habitantes de la villa -apenas si llegan a 4.000 en el casco urbano- se concentraron en las inmediaciones de la tienda de comestibles de la ganadora del sorteo extraordinario.Juana Artiles es ampliamente conocida en el pueblo porque, además de trabajar en su negocio, es la encargada de la agencia de correos de Agüimes. Asimismo, su familia tuvo durante más de 30 años la responsabilidad de la central telefónica de la localidad antes de que se automatizara el sector. Juana Artiles afirmó que "acostumbra a comprar cupones de ciegos con cierta frecuencia, pero siempre lo pagamos a medias entre mi empleado y yo; lo hacemos más que nada por ayudar a María Jiménez, que es la vendedora inválida que recorre el pueblo en un carrito especial".

La afortanada, que era felicitada por todos los vecinos en medio de una pequeña fiesta improvisada, no daba, mucha importancia a los millones; obtenidos: "este premio es una bobada si lo comparamos con las sumas del gordo de la lotería nacional; de todas formas nunca viene mal". Curiosamente, la afortunada invitaba a todo el mundo con las tres botellas de güisqui que le habían regalado los agentes de las tres únicas sucursales bancarias que existen en esta localidad.

Juana Artiles confesó que aún no sabe que hacer con los 30 millones que le tocaron, pues piensa mantener su negocio intacto, sin hacer reformas de ningún tipo. En cambio, su empleado José Santana manifestó que se iba a comprar una casa porque en la actualidad reside en una de alquiler.

Los dos agraciados piensan, eso sí, organizar una gran fiesta en la plaza de Agüimes como prólogo de los próximos carnavales.

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