Enrique Tierno: "Madrid es una ciudad que empieza a saber divertirse en paz"
"Madrid es una ciudad que empieza a saber divertirse en paz, a estar alegre. Cosa que ya sabía desde siempre y que está recuperando", afirmó ayer el alcalde de Madrid, Enrique Tierno, quien se mostró muy satisfecho por la inexistencia de gamberradas y de incidentes de gravedad y por la forma civilizada y entusiasta con que los madrileños celebraron la Nochevieja. El alcalde, después de tomar las 12 uvas en su domicilio, se dedicó durante más de dos horas a recorrer las calles de la ciudad, saludando a sus convecinos.
El coche de la Policía Municipal en que viajaba Tierno recorrió la zona de la calle Orense, bajó por Ventas, San Blas, puente de Toledo, distrito Centro y, lógicamente, pasó por la Puerta del Sol y la Plaza Mayor."Sólo en estos dos últimos lugares", dijo el alcalde, "observamos muchos cascos de botellas rotos y, esparcidos por el suelo. Fue la única cosa que debo reconocer que no me gustó. Ya se han retirado la mayoría de los cristales, para evitar que haya algún accidente, pero ahora, con esto de los permisos, tenemos la plantilla mermada y aún no se ha podido limpiar todo. Yo pediría a los porteros de los inmuebles, los dueños de los bares, las discotecas y los establecimientos públicos en general, que en estas fechas, que son sólo un par de días al año, hicieran un pequeño sacrificio y limpiaran sus aceras inmediatamente, para ayudar al ayuntamiento a dar un aspecto limpio a la ciudad".
No hubo accidentes graves
Tierno fue invitado a tomar una copa en todos los lugares en que se paró. "A lo largo del recorrido hablé con mucha gente, y en todos los sitios advertí una actitud muy correcta de la gente, dentro de los excesos de alegría comprensibles en una noche como la fin de año".Los bomberos tuvieron una noche ajetreada. En 16 ocasiones diferentes recibieron llamadas de auxilio, pero en ningún caso por accidentes de consideración. La mayoría de las llamadas fue para rescatar a personas que, por sobrecargar los ascensores, habían provocado la detención del aparato entre dos plantas. Hubo también 15 comisiones entre vehículos, todas sin demasiada importancia, y algunos incendios menores provocados en recipientes de basuras.
Por su parte, la Guardia Civil de Tráfico informó ayer que no se produjo ningún accidente mortal en las carreteras de la provincia. El de mayor gravedad ocurrió a las 2.45 de la madrugada, en la carretera de La Coruña, cuando una persona resultó herida al chocar un Ford Fiesta, matrícula M-1274-FK, contra una farola de alumbrado público
