Un hombre, muerto por un toro en Arcos de la Frontera
Tras 116 años de celebración ininterrumpida, el toro del aleluya de Arcos de la Frontera (Cádiz) se cobró su primera víctima en la persona de Antonio García García, de 35 años de edad, casado y con cuatro hijos, que falleció al ser corneado en la cabeza por un toro de 500 kilos. Este tipo de festejos, que consisten en soltar un toro por las diversas calles de la población, se viene celebrando tradicionalmente cada domingo de Resurrección en las localidades gaditanas de Arcos de la Frontera, Paterna de la Rivera y Vejer de la Frontera. En este último municipio también se registró otro accidente al perder un joven un dedo de su mano tras la embestida del toro.
Antonio García García perdió su vida al ser corneado en la cabeza por un toro, minutos después de que fuese soltado, ante la expectación de miles de personas, para que recorriese algunas calles de Arcos de la Frontera. El accidente se produjo cuando el toro volvió la cara y Antonio García, que corría detrás de él, resbaló y cayó al suelo. La víctima trató de parapetarse debajo de un tractor, pero el animal consiguió clavarle uno de sus pitones en la cabeza.
