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El Parlamento vasco aprueba la puesta en marcha del Ente de la Energía

La puesta en funcionamiento del Ente Vasco de la Energía fue aprobada ayer por el Parlamento autónomo, en el curso de una sesión plenaria celebrada en Vitoria, con los votos favorables del PNV y PSOE.

Euskadiko Ezkerra, que se abstuvo sistemáticamente en las votaciones fundamentales, presentó una enmienda a la totalidad, solicitando la devolución del proyecto por entender que la creación del ente -reflejo de los pactos en materia energética firmados entre las administraciones central y vasca el pasado mes de marzo- se había conseguido "a cambio del compromiso de la puesta en marcha de Lemóniz". El mencionado grupo presentó una proposición no de ley en la que se señala que los mencionados acuerdos "son absolutamente inútiles en tanto no se celebre un referéndum sobre la central nuclear".

A excepción de las peticiones de llevar a cabo un mayor control parlamentario sobre el ente público, los socialistas se mostraron favorables a la creación de un organismo coordinador en materia energética. Nada más comenzar la explicación de las actitudes de los diferentes grupos en torno al proyecto del Gobierno, el portavoz socialista, Juan Manuel Eguiagaray, dijo que su grupo había aceptado la tramitación de la ley porque, "con o sin Lemóniz, la comunidad vasca deberá dotarse de un instrumento adecuado para llevar a cabo una política energética".

En esta misma línea, y para responder a Euskadiko Ezkerra y a Alianza Popular, que por razones opuestas pusieron sobre el tapete el funcionamiento de la central nuclear de Lemóniz como condición previa a la aprobación del Ente Vasco de la Energía, el consejero del Gobierno autónomo Javier García Egotxeaga hizo especial hincapié en la necesidad de llevar a cabo una política de racionalización. En este sentido, definió el ente vasco como "la espina dorsal de un esfuerzo enorme de política unitaria en materia energética".

Control de las actividades

Los acuerdos que se firmaron el pasado mes de marzo entre los dos Gobiernos preveían la creación del Ente Vasco de la Energía, integrado por la Sociedad de Gestión de Lemóniz, la Sociedad Distribuidora del Gas y el Centro para el Ahorro y Desarrollo Energético y Minero (CADEM). Aunque la existencia del mencionado organismo fue aprobada por el Gobierno vasco mediante decreto y constituido formalmente el pasado mes de mayo (un día después de que ETA Militar asesinara al ingeniero Ángel Pascual), el ente no se ha puesto todavía en funcionamiento, en previsión de que la Cámara vasca diera luz verde al proyecto legislativo que prevé su configuración interna y el control parlamentario sobre los fondos y sus actividades.Por su parte, el partido mayoritario nacionalista, siguiendo la orientación marcada por el consejero del Gobierno vasco, explicó, respondiendo a Euskadiko Ezkerra, que el Ente Vasco de la Energía "no es una tapadera de nada".

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