Cuba explica a los bancos españoles el plan de devolución de créditos
La delegación cubana, encabezada por el presidente del Banco nacional de Cuba, Raúl León Torras, expuso ayer en Madrid a reprersentantes de quince bancos españoles las modalidades del plan que Cuba piensa seguir para la renegociación de su deuda exterior. La reunión se celebró en la sede del Banco de España y asistieron a la misma los bancos afectados por la solicitud de aplazamiento de los pagos de la deuda cubana, que asciende a unos 2.700 millones de dólares (300.000 millones de pesetas), de los que 450 millones corresponden a España.La explicación dada a los banqueros coincide con las razones expuestas a las autoridades españolas durante los últimos días, en una serie de reuniones que concluirán mañana. Cuba es partidaria de iniciar conversaciones separadamente con cada uno de los acreedores, mientras que el Gobierno español se inclina por un "acuerdo multilateral". Las negociaciones para un acuerdo con el conjunto de acreedores podrían iniciarse a mediados del mes próximo.
Las pretensiones de los representantes cubanos básicamente se reducen a dos: vencimiento a diez años para la deuda a medio o largo plazo (un año o más) y noventa días de demora para la deuda a corto. Asimismo solicitan de los bancos en general -no sólo de los españoles- líneas de crédito por importe de ochocientos millones de dólares, de los cuales serían utilizados unos 480 millones.
La delegación cubana señaló como causante de la delicada situación financiera por la que atraviesa su país la actitud de los "países de economía de mercado", que en los últimos años les han ido cortando las líneas de crédito hasta en un 60%. A ello hay que añadir el bloqueo económico a que les ha sometido Estados Unidos y la baja en el precio de azúcar, su principal fuente de divisas. Como responsables de esta fuerte caída acusaron a los precios dumping que están practicando ciertos países de la CEE que, en dos años, han aumentado su penetración en el mercado mundial del 1% al 24%.
La situación financiera fue calificada de no tan preocupante como la de otros países y Cuba tiene previsto iniciar un plan económico basado en la diversificación de sus fuentes de ingresos.
