Los funcionarios de la Administración cobrarán este mes sus salarios con un aumento medio del 10%
Los funcionarios de la Administración central percibirán en la nómina del presente mes de enero el aumento de salarios contenido en el proyecto de ley de presupuestos pendiente de discusión en la Cámara.
La disolución de las Cortes ha dejado en trámite la aprobación de la ley de presupuestos. Automáticamente se han prorrogado los presupuestos del pasado año que permiten la continuidad de la labor administrativa y la cobertura de los compromisos de pago de la Administración. Con objeto de no retrasar la subida de sueldos de los funcionarios el Gobierno aprobó un decreto-ley por el que se ponen en vigor los artículos de los proyectos de presupuestos para 1979 referidos a este capítulo. La justificación política del decreto se basa en el hecho de que el Pleno del Congreso rechazó las enmiendas a la totalidad del proyecto de ley del Gobierno y de que las enmiendas presentadas a los artículos sobre retribuciones en ningún caso tratan de reducir éstas.El decreto, que se publicará en breve en el Boletín Oficial, supone incrementar la media de retribuciones en un 10%, conforme al proyecto de ley de presupuesto. Este aumento no coincide con el previsto en el reciente decreto sobre política económica y concretamente de rentas aprobado por el Gobierno una vez confirmada la imposibilidad de pactos. Según ese decreto los aumentos de sala nos de los funcionarios pueden llegar hasta el 13%, y en este sentido se piensa modificar el proyecto de presupuestos si el actual Gobierno se mantiene después de las elecciones. En caso de que se aprobara el presupuesto los funcionarios percibirían, una vez en vigor la nueva ley, una cantidad compensatoria de lo no cobrado en los primeros meses del año.
El aumento mínimo que percibirá un funcionario según el decreto aprobado por el Gobierno será de 42.000 pesetas al año, excluidos trienios. Las retribuciones complementarlas, dice también el decreto, mantendrán este año la misma estructura y cuantía que en el año anterior y lo mismo ocurrirá con las indemnizaciones o recompensas.
Lo mismo que con los salarios ocurre con las pensiones de los funcionarios según dispone el decreto. Para la aplicación del mismo se concederán créditos extraordinarios que compensarán las cantidades previstas en el proyecto de presupuestos.
Programa de inversiones
Al margen de las retribuciones de los funcionarios el otro capítulo comprometido por la ausencia de nuevos presupuestos es el referente al programa de inversiones. El Gobierno ha proyectado un esfuerzo importante de gasto público para el año actual con objeto de compensar la atonía de la inversión privada. La prórroga de presupuestos de ejercicios anteriores solía formularse por doceavas partes aplicables a cada mes del año. En esta ocasión la prórroga del presupuesto anterior se ha hecho con carácter global de forma que cada Ministerio podrá disponer de fondos para abordar nuevos proyectos.Desde los ministerios de Economía y Hacienda se ha reiterado a los distintos ministerios, especialmente a los que protagonizan mayores gastos de inversión (Obras Públicas, Agricultura, Transportes e Industria), la necesidad de que se inicien con carácter inmediato los concursos y nuevos planes de inversiones previstos para el año.
Por razones electorales y de orden económico las autoridades pretenden que el sector público cubra un buen porcentaje de la actividad económica en el primer semestre del año en que la inversión privada se mantendrá inactiva en espera de los resultados de las elecciones generales y municipales convocadas para los meses de marzo y abril.
Entre las instrucciones dadas a los diversos ministerios se incluye la recomendación de que activen toda la tramitación de nuevas obras o contratos hasta la fase última, aun cuando no existan fondos presupuestarios, con objeto de acelerar luego las inversiones.
Balance de 1978
En el Ministerio de Hacienda se preparan en esté momento los avances del cierre del ejercicio fiscal 1978, que supondría un balance satisfactorio por el grado de ajuste de las previsiones y las realizaciones.El crecimiento de los ingresos presupuestarios se situará en torno al 30%, que supone una cifra importante lograda en base a un aumento de la presión fiscal próximo al 1%. Si estas cifras se confirman pondrán de relieve que en el año de la reforma fiscal se ha producido un incremento serio de la recaudación pese a que no ha subido la gasolina con los efectos recaudatorios que tiene y a que la renta de aduanas ha sido claramente recesiva.
El déficit presupuestario se situará en torno a los 70.000 millones, y en el capítulo de los créditos extraordinarios, que en otros ejercicios han supuesto un auténtico presupuesto adicional, tampoco parece que vayan a producirse sorpresas sustanciales al margen de los importantes créditos aprobados en apoyo de la siderurgia y del sector naval.
