Israel, acusado de entorpecer la paz en Oriente Próximo
La decisión del Gobierno de Israel de establecer tres nuevas colonias judías en los territorios ocupados a Jordanla y Siria durante la guerra de 1967 ha provocado las críticas del Departamento de Estado norteamericano, del secretario general de las Naciones Unidas y. de las capitales árabes, que ven en esta nueva decisión israelí la corroboración de las intenciones de Tel-Aviv de anexionarse definitivamente los territorios arrebatados en la «guerra de los seis días» y la consideran como un nuevo obstáculo para la paz en la región.Ayer, el embajador de Estados Unidos en Tel-Aviv entregó al Gobierno israelí una nota en la que se recuerda a Israel que la creación de nuevos enclaves judíos en los citados territorios constituye un obstáculo para la paz en Oriente Próximo y para la reanudación de la conferencia de Ginebra. La decisión israelí, la tercera de un carácter similar adoptada por Tel-Aviv desde la visita del primer ministro Menahem Begin a Washington, puede contribuir a empeorar las relaciones entre Estados Unidos e Israel.
Más enérgica ha sido la reacción del secretario general de las Naciones Unidas, Kurt Waldheim, que ha lamentado la decisión israelí y manifestado su profunda preocupación por los últimos acontecimientos en Oriente Próximo a la vez que insistía en que Israel debe acatar la resolución del Consejo de Seguridad, que obliga a este Estado a abandonar los territorios ocupados.
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