Grave incidente al despedirse el gobernador cesante de Guipúzcoa
El funcionario del Cuerpo General de Policía, Valentín Alvarez, de veintidós años, fue víctima de un grave incidente ocurrido el domingo, a la 1.30 de la tarde, en el Gobierno Civil de Guipúzcoa, en el mismo momento en que el gobernador civil cesante, José Manuel Menéndez Manjón, salía del edificio para marchar ya definitivamente de la provincia de Guipúzcoa.
Según ha podido saber EL PAIS, en el momento en que el señor Menéndez Manjón descendía del primer piso para despedirse de sus directos colaboradores que le esperaban en el vestíbulo, uno de los policías armados que realizaba su servicio reglamentario en la puerta del edificio, José Juárez Rodríguez, sacó su pistola y disparó indiscriminadamente cuatro tiros entre la gente que allí se encontraba.Los disparos hicieron blanco en el cuerpo del policía Valentín Alvarez, que fue trasladado inmediatamente a la residencia sanitaria de la Seguridad Social Nuestra Señora de Aránzazu, donde se encuentra internado en la unidad de cuidados intensivos.
Diez minutos antes de producirse el hecho, había estado en el despacho del gobernador civil cesante el delegado de Información y Turismo de Guipúzcoa despidiéndose. Al parecer, y esto no ha podido ser confirmado, puesto que las informaciones del suceso han sido oscuras y difíciles, la familia del señor Menéndez Manjón le esperaba dentro del coche, a la puerta del edificio donde había ocurrido el hecho.
Testigos presenciales fueron, yaque se encontraban en el vestíbulo del edificio, el comisario-jefe de policía y su mujer, y diversos miembros y funcionarios del Gobierno.
Según se dice en la nota oficial que se ha facilitado a los medios de comunicación, «el policía armado de servicio sufrió un ataque de enajenación mental, empuñando la pistola reglamentaria contra un grupo de personas que en aquel momento se encontraban en el zaguán del edificio del Gobierno Civil».
El estado del herido, a última hora de la tarde de ayer, era grave, y según un parte médico, sufre dos impactos de bala, uno en cada hemitórax, y un endema en la cara producido por los disparos.
